Cuando el pequeño Nicolás se unió a los Jóvenes Españoles de Abascal

En junio de 2012, cuando Vox no aparecía ni en las conversaciones de los españoles y aún quedaban dos años para que estallara el caso Nicolás, que destapó las cloacas del Estado, el joven Francisco Nicolás Gómez Iglesias ya comenzaba a hacer sus pinitos en política de la mano de Santiago Abascal, que por aquel entonces tenía en la Fundación para la Defensa de la Nación Española (Denaes) su tribuna más visible. Así consta de hecho en las actas que las asambleas de esta fundación aprobaron y a las que ha tenido acceso El Confidencial.

En concreto, el día 15 del citado mes, Gómez Iglesias formó parte de una reunión del comité de dirección de Jóvenes Españoles de Denaes junto a otros miembros como Gabriel Martín, María Puentes, David Marín, Sara Sáez, Santiago Ribas o Ignacio de Saavedra, que ejercía como coordinador nacional de la plataforma. En el encuentro, los asistentes aprobaron algunos nombramientos que en ese momento se formalizaron dentro de la agrupación juvenil y leyeron los agradecimientos que trasladó el presidente de la fundación "por la labor" que estaba haciendo el colectivo juvenil.

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"Más concretamente, por la movilización realizada para la concentración frente a la embajada de Argentina", añadía el texto de Abascal, que también se refirió "a la propia confianza" que el máximo dirigente de la formación tenía puesta "en todos los miembros del comité de dirección" de la organización juvenil. Añadió que estaba muy "contento" también por los "resultados" que habían obtenido los miembros de Jóvenes Españoles en concentraciones como la que montó la asociación de víctimas Voces contra el Terrorismo aquel año en la madrileña plaza de Colón o la mencionada de la embajada argentina. "Fuimos necesarios y tuvimos repercusión en medios internacionales", recordó Abascal, que animó a sus 'cachorros' a "seguir adelante".

Denaes fue el germen de lo que posteriormente sería Vox, una organización que se constituyó como partido político en diciembre de 2013 al amparo de Abascal, José Antonio Ortega Lara, Alejo Vidal-Quadras e Ignacio Camuñas, entre otros. Gómez Iglesias, sin embargo, nunca formaría parte de esta formación, que alcanzó su máxima notoriedad cinco años después, tras las elecciones andaluzas en las que la organización logró una docena de inesperados escaños. El joven Francisco Nicolás, de hecho, fue detenido en octubre de 2014, momento en el que saltó a la fama por hacerse pasar por representante de Vicepresidencia del Gobierno y del Centro Nacional de Inteligencia.

Gómez Iglesias prefirió apostar por el PP que entonces presidía Mariano Rajoy. En concreto, el chico llegó a ser presidente del club juvenil de la delegación del partido en el distrito madrileño de Moncloa Aravaca, donde comenzó a tener contacto con diferentes dirigentes y no pocos empresarios, con los que de hecho se inmortalizó en imágenes que luego dieron la vuelta al país. Aun así, su vinculación más fuerte fue con el 'think tank' Faes.