El refugio cuasi monacal y ribereño de la presidenta Ayuso

“No hubo mucho revuelo, porque no es muy conocida aún por estas tierras, pero el boca a boca funcionó de inmediato…”, relata a este confidente un turista hospedado en el Hotel Lagar de Isilla, situado en la localidad ribereña de La Vid, a escasos kilómetros de Aranda de Duero y en pleno corazón de la Ribera burgalesa. El boca a boca rápidamente se extendió entre los alojados: Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, estaba allí.

“Alguien me había hablado de este maravilloso lugar y he venido a relajarme”, relató a uno de los empleados del establecimiento la política del PP.

El hotel con encanto, cuatro estrellas y con una afamada gastronomía y una vinoteca de alto postín (los propietarios elaboran sus propios vinos, pero está ampliamente surtida de los mejores caldos nacionales e internacionales), está situado justo al lado del Real Monasterio de Santa Maria de la Vid, gestionado por los padres agustinos. Es una joya arquitectónica y en su interior cobija cuadros de alto valor histórico así como una espectacular talla de la Virgen de la Vid. Fue residencia del emperador Carlos en sus visitas por la zona de la Ribera del Duero.

El precio por habitación doble y noche ronda los 100 euros, dependiendo de la temporada. Se trata de un establecimiento hotelero donde todos sus motivos y decoración están presididos por el vino.

Parece ser que algún compañero del Partido Popular recomendó a la presidenta de la comunidad madrileña que, si lo que deseaba era relajarse y pasar desapercibida un fin de semana, no había otro lugar como el citado. Dicho y hecho.

Y, eso sí, aseguran que prometió volver.