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Llega el Tinder de los abogados
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Llega el Tinder de los abogados

Para registrarse, la 'app' te pregunta si formas parte del sector legal o eres "una persona normal". Para toda necesidad insatisfecha, una propuesta para satisfacerla

Foto: Foto: iStock.
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Tinder, para quien no lo sepa, es una 'app' de citas en la que el usuario va aceptando o descartando potenciales parejas y cuando dos personas se han aceptado mutuamente, el sistema las pone en contacto. Como ya contábamos en este artículo de hace unas semanas, las jornadas maratonianas, la altísima presión del trabajo y el día a día con los compañeros llevan a muchos a pensar que un letrado difícilmente puede mantener una relación sentimental duradera. ¿Mito o realidad?

En EEUU hay estadísticas. La tasa de abogados divorciados en el país es del 27%, superando a otros empleos históricamente asociados a las rupturas, como los médicos (24,4%). En la población general, la ratio de separaciones ronda el 2,5%. En España no hay datos, pero una consulta a varios psicólogos especializados en pacientes del sector legal aseguraba para ese artículo que, también en España, el mito se ajusta bastante bien a la realidad.

Pero desde comienzos de 2021 está disponible la 'app' Lawyr, pensada para 'celestinear' entre los profesionales del sector legal.

Para registrarse, la 'app' te pregunta si formas parte del sector legal o eres "una persona normal". Y ya si eliges la primera opción te solicita que concretes entre varias opciones: estudiante de Derecho, en prácticas, paralegal, ejecutivo, abogado, socio, juez... Para toda necesidad insatisfecha, una propuesta para satisfacerla. Es el mercado, amigo.

Tinder, para quien no lo sepa, es una 'app' de citas en la que el usuario va aceptando o descartando potenciales parejas y cuando dos personas se han aceptado mutuamente, el sistema las pone en contacto. Como ya contábamos en este artículo de hace unas semanas, las jornadas maratonianas, la altísima presión del trabajo y el día a día con los compañeros llevan a muchos a pensar que un letrado difícilmente puede mantener una relación sentimental duradera. ¿Mito o realidad?