Niña, que te pincho con el Tridente

Las cifras de paro son las que son, la macroeconomía va por un lado y los ciudadanos sentimos otras cosas pero no se puede caer en la melancolía tanguera. Ladies and gentlemen tengo que anunciarles que todavía quedan ricos y sobre todo, ganas de ver y de que te vean. Enrique Lorenzana, director de desarrollo para Europa de la firma Maserati quiso hacer parada y fonda en Madrid para presentar la última novedad de la marca del Tridente; el Maserati Quattroporte. Un pepino volador que combina a la perfección elegancia, exclusividad y cuyos 530 caballos superan, cuando acelera, el rugido de un tigre de bengala.

El anterior embajador italiano, el actual no pudo acudir y nos mandó a su consigliere Marco Rusconi, me confesó que las dos cosas que más le gustaban de ser el representante de Italia en España eran el palacio que ocupaba en Velázquez y el Quatroporte que tenía asignado.  

Lorenzana, un gran coleccionista de coleópteros, comentaba a quien le escuchaba que España es un país de contrastes en el que hemos pasado de ser los que más gastábamos a los más austeros. No corren buenos tiempos para presentarse en la urba o en tu empresa con un Maserati, pero en China hay 30 millones de ricos que demandan lujo europeo. La gente asentía mientras comía y bebía en caño libre Moet Chandon y los finos aperitivos que ofrecía el restaurante Zalacaín ubicado en la urbanización La Finca, encame de futbolistas y celebrities de todo origen y condición.  

Cuando llegas a un evento tan exclusivo siempre te preguntas si darás la talla. Al dar mis primeras vueltas de reconocimiento reparé en que no todos los asistentes tienen pinta de ser dueños de un Maserati. Señoras mayores pidiendo guerra en vestidos ajustados, maridos incombustibles con ganas de meterse en alguna trinchera aprovechando la coyuntura, arribistas de todo tipo que acuden cual urracas al brillo del oropel y chavales que olvidan quitar la marca de la bocamanga de la americana me hicieron sentir más tranquilo.

Para presentar el acto, una mujer a quien Dios no le ha concedido el don de la palabra pero sí un físico imponente. La modelo Nieves Álvarez hizo que nos hablaba de la marca y pegó un respingo cuando el motor Ferrari empezó a bramar. Hay que decir que la directora de Vogue España, Yolanda Sacristán, no le va a la zaga en belleza. Por mujeres como ella me hice yo periodista y no encofrador que era lo que de verdad me aguardaba el destino. 

Otro tipo de belleza es la que representa Carolina Alcázar, presentadora del programa Más que Coches de Telecinco. Prietez a tutti plen, cercanía castiza y una sonrisa que da ganas de decirla; José Luis Torrente, a su servicio, señorita. Me la presentó Gonzalo Serrano, editor del programa y uno de esos periodistas que saben todo de la F1 y que sólo se han dado a conocer desde que Fernando Alonso es el campeón mundial. Además, tuvo a bien darme las claves para triunfar en Telecinco; haz siempre lo que te diga Vasile y no andes enredando por los pasillos. Como buen periodista quise contrastar la información con uno de los pocos españoles con mando en plaza en la Cadena Amiga, Mario Rodríguez Valderas, pero la fuerte demanda social que se ejercía sobre él impidió mi cometido. Le acompañaba Massimo Musolino, director general de Operaciones de Telecinco pues los directivos de Mediaset siempre van de dos en dos, como los donuts.  

Las azafatas eran muy guapas y se te acercaban para pedirte los datos. Yo soñaba con participar en el sorteo de un buga de estos pero era sólo para brasearte con publicidad. Cuando hacía motor tuve la oportunidad de visitar la fábrica de Maserati, los coches los hacen todos a mano, y me contaron que un jeque árabe pidió la tapicería del color favorito de pintalabios de una de sus cien mujeres. Desde entonces siempre lucho por superarme. 

Entre los asistentes pude ver a Gonzalo Miró, al que nunca pillarás trabajando en una oficina; a Carmen Lomana -una amiga envidiosa me dijo que parecía un ninot indultat, que hacía que los hombres se girasen para mirarla el trasero-, y a la presentadora Raquel Sánchez Silva a la que no es fácil verla vestida de mujer y no de aventurero con botas.

Me dicen que acudió, aunque yo no le vi, Alfonso de Borbón Yoldi, un chico que con el que coincidía en mi juventud. Ejemplo de niño mal de cuna bien, que era muy de pelearse con la gente pero cuando acudía la Policía iba raudo y veloz a recordarles que era sobrino del Rey.  

Eduardo García Cereceda asistió en representación del fundador de los dos elementos que nos acogían; la urbanización La Finca y el restaurante Zalacaín. El exjugador de baloncesto del Real Madrid José Miguel Antunez se prodiga mucho por los saraos buscando quien le fiche como comentador deportivo, pues siempre recuerda que en el baloncesto no pagan lo que en el fútbol y encima él cogió una mala época.

Para no romper la antigua tradición de dar siempre un detalle en los eventos del motor, entre los compañeros del sector se le llama el cohecho, la firma del Tridente nos obsequió con un vale para hacerte camisas en Pedro del Hierro con descuento, un tarjetero de Maserati y un teléfono Samsung Galaxy de chocolate blanco.