¿Bajistas? Mucho rugido y pocas nueces

No carecen de argumentos los escépticos. Me encuentro entre ellos desde septiembre. Pero ser escéptico y negar la realidad son cosas bien distintas. Un mercado maduro puede subir un 25%. O nada. Lo que sabes es que ya no es terreno muy sostenible sin correcciones amplias en precio o tiempo. Es un mercado en el que hay que estar, pero en el que hay que estar con exposición controlada y ganas de ser restrictivo llegada la hora… Esa hora, según los precios, ni siquiera se ha insinuado.

Es así de sencillo, como vengo escribiendo en mis últimas tribunas. Los mínimos y los máximos crecen, fin del recuento de monos en los árboles. Y es que si eran pocos los alcistas, parió la abuela. Sí, me refiero a la volatilidad, la única de las novedades relevantes a comentar de las últimas semanas. Puede verse en el gráfico cómo de nuevo la volatilidad del DAX se ha frenado en su antiguo soporte. No hay más preguntas señoría.

Y lo mismo podría decirse del VIX y del VXN norteamericanos, donde aunque no se producen (aún) nuevos mínimos, hay que destacar que hoy transitamos en niveles de máximos históricos sin que esta esté aumentando como ha venido sucediendo antes de las últimas correcciones del S&P500. Pues ahora, incluso con las dudas del Nasdaq, nada. De hecho puede verse que su volatilidad se ha venido abajo y amenaza con marcar nuevos mínimos descendentes por primera vez desde junio.

La semana ha supuesto nuevos altos históricos en cierre para algunos índices, con un Dow Jones de Transportes estelar y un Nasdaq tímido. Muy llamativo el movimiento de vuelta sobre primer soportes de un Russell2000 que ha llegado a poner en apuros a la zona de primer soporte en tendencia. Con otro pasito al frente del S&P500, se estaría resquebrajando la gran resistencia ascendente que se proyecta uniendo los altos de 2015 y 2018.