Wall Street ignora ahora el hundimiento de sus bonos

Decía la semana pasada en una amplia tribuna que Wall Street podría haber salvado muchas barbas. Y es que las bolsas han llegado a tener mala pinta y, fuera del mercado norteamericano, un aspecto realmente deteriorado más allá del corto plazo. La semana que hemos dejado atrás no añade nada nuevo.

Tenemos a un mercado que se recupera en “v” fuera de nuestras fronteras, y a un mercado norteamericano que se ha reconstruido con patrones más o menos generalizados en la única tendencia que estaba tocada: el corto plazo.

La excepción la teníamos y la seguimos teniendo en el Russell2000, que esta semana se quedó ligeramente por detrás del resto nuevamente. Brillaron el NYSE Composite y el Nasdaq, ignorando la tecnología eso que tantas veces ha parecido preocuparla especialmente: el aumento de tipos de interés, pues la pasada fue una de las peores semanas que recuerdan el mercado de letras y bonos norteamericanos. Siguió perdiendo altura la volatilidad.

¿La idea? Un mercado que no ha empeorado ya es una gran noticia para los alcistas. Un mercado que mantiene sus soportes clave en tendencia en Wall Street es un mercado más alcista que bajista a medio plazo. Mientras eso no cambie, por supuesto.

¿El camino? Una recuperación mayor, que podría llevar a algunos índices norteamericanos a hacer nuevos máximos, pero siempre dentro de un proceso consolidativo en el tiempo como escenario más favorecido. En zona de tan extraordinarias resistencias crecientes como las que el mercado ha puesto a prueba desde finales de 2021, no está nada mal para los alcistas.