Es noticia
Para qué ha creado la Fed una cuenta especial…
  1. Mercados
  2. El Abrazo del Koala
Marc Garrigasait

El Abrazo del Koala

Por

Para qué ha creado la Fed una cuenta especial…

La Reserva Federal (Fed), el banco central norteamericano, está seguramente casi tan apalancado como lo estaba Lehman Brothers antes de su quiebra. Con cerca de un

La Reserva Federal (Fed), el banco central norteamericano, está seguramente casi tan apalancado como lo estaba Lehman Brothers antes de su quiebra. Con cerca de un trillón (anglosajón) de bonos en su balance tras las continuas compras por los diversos programas de Quantitative Easing desde 2008, mantiene un apalancamiento de 55 veces su capital. Este es el apalancamiento que existía en el sistema bancario en 2006-2007, justo antes de la crisis bancaria iniciada en 2008.

Como la duración o vida media de su cartera de bonos es de unos 8 años, con apenas un alza de menos del 0,5% en el tipo de interés de sus bonos, la caída de precios consiguiente se comería la totalidad de sus recursos propios. Con una subida de los tipos de interés a 10 años de un solo punto porcentual (del 1,9% actual al 2,9%) se comería cuatro veces los recursos propios publicados en su balance oficial.

placeholder

¿Qué ocurriría si la FED sufriese estas billonarias pérdidas en su balance? De entrada no pasaría nada. Los bancos centrales no se rigen con las normas de los bancos comerciales y, por tanto, no deben cumplir ninguna normativa de Basilea. No deben tener ningún ratio de capital TIER, por ejemplo. En consecuencia, ese día no ocurriría nada, ya que obviamente ningún organismo intervendría al banco central de un país. Sí que produciría, en cambio, una pérdida de confianza en los mercados financieros a todos los inversores y ahorradores. Normal, alguien podría cuestionar, “¿qué está haciendo la Fed actuando como un hedge fund apalancado o como un Lehman Brothers o Bear Stearns?”, o bien, “¿no es esta actitud de apalancamiento y excesos la que precisamente nos ha conducido a la crisis actual?

Quizás no estamos tan lejos, ya que la Fed ha tomado muy recientemente una decisión insólita. Hasta la fecha actual, cuando la Fed cobraba intereses de los cupones de los bonos del tesoro de EEUU los transfería a la cuenta del Tesoro norteamericano. Era una forma de devolverlo a la sociedad, ya que estos cupones se pagan con los impuestos a los ciudadanos. Por ejemplo, en enero de 2013, la Fed comunicó que transfirió al Tesoro 88.900 millones de dólares correspondientes al año 2012.

La sorpresa fue un reciente anuncio de la Fed, que he conocido gracias a la lectura semanal del informe del gestor de fondos John Hussman, quizás el mejor análisis macroeconómico relacionado con los mercados financieros que escriba nadie en el planeta. En este anuncio de la Fed, comunicaba que había creado una cuenta especial llamada deferred asset, algo así como “activo diferido”. En esta cuenta, la Fed se quedará con los intereses en lugar de devolverlos al Tesoro norteamericano. Es decir, no se beneficiarían los ciudadanos. En un reciente testimonio en el Congreso americano, Ben Bernanke realizó la declaración más enrevesada y confusa que le recuerdo para informar, o más bien desinformar, de este significativo cambio de política, “it is an asset in the sense that it embodies a future economic benefit [to the Fed] that will be realized as a reduction of future cash outflows [to the public]”. Se parece bastante a la explicación de Cospedal sobre el finiquito pagado a Luis Barcenas.

Aunque lo realmente importante para el mundo económico y financiero no es el beneficio o pérdida del ente que imprime los billetes y fija la política monetaria, sino que es conocer cuando la Fed empezará a vender sus bonos al mercado, o lo que es lo mismo, cuándo detraerá, retirará las masivas inyecciones artificiales. Quien acierte el día que la Fed empezará a soltar lastre, acertará grandes variaciones en los precios de los principales activos, como los bonos, las acciones y las materias primas.

Pero, ¿y si ese día no llega? ¿Y si la Fed no reduce su enorme balance? Es decir, que no ocurra, por ejemplo, en los próximos 10 años.

En resumen, por un lado pienso que la Fed podría estar preparándose para compensar futuras pérdidas en su balance mediante el colchón de los intereses cobrados. Por otro lado, pienso que la Fed y el resto de bancos centrales en el mundo no podrán retirar del sistema todas sus inyecciones para evitar un desplome en los mercados financieros. Por tanto, es muy probable que veamos un resurgimiento de las tasas de inflación futura. A corto plazo, no hay ni un solo síntoma, pero la historia nos enseña que este sería el escenario más probable en algún momento futuro.

La Reserva Federal (Fed), el banco central norteamericano, está seguramente casi tan apalancado como lo estaba Lehman Brothers antes de su quiebra. Con cerca de un trillón (anglosajón) de bonos en su balance tras las continuas compras por los diversos programas de Quantitative Easing desde 2008, mantiene un apalancamiento de 55 veces su capital. Este es el apalancamiento que existía en el sistema bancario en 2006-2007, justo antes de la crisis bancaria iniciada en 2008.