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¡Ayuda!, no entiendo qué pasa con Bankia
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Alberto Roldán

El Inversor Inteligente

Por
Alberto Roldán

¡Ayuda!, no entiendo qué pasa con Bankia

“Nada en el mundo es más peligroso que la ignorancia sincera y la estupidez concienzuda” (Martin Luther King) El pasado martes, Bankia inició

“Nada en el mundo es más peligroso que la ignorancia sincera y la estupidez concienzuda” (Martin Luther King)

El pasado martes, Bankia inició una ampliación de capital, como parte de su plan de reestructuración, que dio paso a una de esas hilarantes situaciones que a veces se producen en bolsa cuando algo está ocurriendo y nadie es capaz de encontrarle una explicación. Llamadas de periodistas alarmados, los accionistas perdidos, por no decir perdidísimos… En una palabra, caos informativo y, lo peor, de conocimiento. Por todo ello, me parece interesante explicar exactamente qué ocurrió en esa jornada del martes.

Lo prioritario es entender el por qué de la ampliación de capital de Bankia, algo que estoy convencido que casi ningún accionista se tomó la molestia de hacer. Al menos, los accionistas atrapados en la salida a bolsa (OPV) y en posteriores “recomendaciones” de su gestor personal, que son los que mayor desinformación tienen y que siguen penando con unas acciones que, por voluntad propia, siguen conservando por uno de esos misterios que nunca llegaré a entender: el apego que se tiene a algo depreciado y que no tiene valor.

Bien, la hoja de ruta del proceso de recapitalización de Bankia establecía unos pasos previos a la ampliación de capital que básicamente tenían como eje principal la absorción de pérdidas por parte de los accionistas y, posteriormente, la contribución al coste de reestructuración por parte de los tenedores de participaciones preferentes y deuda subordinada.

Un primer paso fue la reducción del capital social desde los dos euros a un céntimo, de tal forma que mediante un apunte contable se dotan reservas para soportar las pérdidas generadas. De esa forma, es el accionista el que absorbe íntegramente las pérdidas resultantes del valor económico negativo que el FROB determina en Bankia (-4.148 millones de euros). De esta forma, el accionista debería entender que es él quien realmente ha soportado la mayor pérdida de entre todos los inversores en Bankia. Y lo recalco porque hay gente que todavía sigue sin entender esta situación y sigue justificando la tenencia de las acciones.

El segundo paso, una vez reducido el capital, fue la realización de un contrasplit, en la proporción 100x1, para reajustar así el nominal de las acciones hasta un euro. ¡Por Dios, nadie tiene más acciones, ni se le regala nada, ni se incrementa su valor! Si no se está preparado para entender estas operaciones… ¿por qué narices compró usted acciones, por qué invierte en renta variable? ¿Culpa del que le enmarronó con la OPV? Puede que sí, pero el responsable único sigue siendo usted por comprar cosas que no entiende. Si usted no compra un coche híbrido, con cambio secuencial, eléctrico, ordenadores, tecnología punta, etc., porque no lo entiende… ¿por qué demonios invierte en acciones?

Y llegamos al tercer paso. La ampliación de capital. El accionista ya ha absorbido las pérdidas y ahora es turno de la inyección de dinero. No entraré en disquisiciones sobre el origen del mismo, pues ese es otro debate que se aparta de este análisis. Lo que nos interesa es la primera ampliación de 10.700 millones de euros con derecho de suscripción preferente, anterior a otra prevista de 5.210 millones de euros con exclusión del derecho de suscripción preferente. Eso supone, señor accionista, que usted tiene una preferencia en la suscripción de las nuevas sobre el resto de inversores, de la misma manera que posteriormente no la tendrá y acabará diluido, y como tal es un derecho económico que puede decidir ejercer o no.

Qué ocurre con la ampliación. Al cierre del lunes las acciones, tras el ajuste de nominal, se sitúan en 11,3 euros. No es que usted de repente multiplique su inversión o que el Estado le haya compensado por las pérdidas sufridas, ni mucho menos que Bankia haya decidido, de manera totalmente altruista, regalarle dinero. ¡No! La acción lo que incorpora es el valor del derecho de tal manera que sus acciones se desdoblan en dos conceptos. Uno, el valor real de sus títulos, que sigue siendo 1,38 euros y los 9,92 euros correspondientes al valor de esa preferencia de suscripción, es decir, el valor de su derecho a conservar su proporción como accionista o a diluirse. Eso totaliza 11,3 euros. Cuando el martes se inicia la negociación, como el derecho es un valor económico negociable, tiene que tener en cuenta la evolución por tanto de la acción, pero también del derecho.

¿Cómo llego a esos 9,92 euros? Calculando el valor teórico de la acción ponderando las acciones antiguas y las nuevas a sus respectivos precios y restándolo del precio de referencia mencionado, 11,3 euros. Un cálculo que la pereza, la desidia o el desconocimiento de la mayoría de accionistas no realiza, pero que es crítico para entender qué es una ampliación de capital.

¿Qué ocurrió? Algo difícilmente explicable como fue el desplome de los derechos, que al cierre acumularon una bajada del 88%, y una subida vertiginosa de las acciones, que les llevó a estar un 756% por encima del precio de referencia, que insisto es 1,38 euros. Lo importante es entender la composición real del precio. Al cierre, las acciones estaban a 4 euros mientras que el derecho lo hizo a 1,24 euros. El valor total de su acción es de 5,24 euros que tiene que comparar con el precio total previo, es decir, los 1,38 euros más el valor incorporado que son los 9,92 euros. ¡Usted ha perdido un 54%! Este es el resultado de comparar esos 5,24 euros con los 11,3 euros.

Si ha entendido bien el efecto de los cálculos, ahora podemos debatir sobre el motivo por el cual el derecho se desplomó o el precio de la acción se disparó.

Personalmente creo que puede haber dos cuestiones. Una relativa a que muchos accionistas institucionales, fondos de inversión y planes de pensiones, vendieron los derechos de manera masiva arrastrando el precio hacia abajo. Esto tiene sentido y explica bastante bien una parte de la historia. Lo que es más complicado es entender la subida de la acción. La otra puede ser que se trataba de bajistas que cerraban su posición recomprando unos títulos escasos. Pues muy posiblemente, pero esto es más cuestionable. Analizando los volúmenes puede que hubiera un short squeeze, pero resulta que el volumen negociado fue un 66% inferior a la media de las cinco sesiones previas o un 200% inferior al que tuvo lugar cuando el FROB anunció el valor económico de las acciones, lo cual me hace ser un poco más reticente en este tema. Igual es más sensato pensar que se está forzando el precio de la acción sabiendo que Bankia recomprará acciones al cambio medio de las sesiones que transcurran desde la fecha de admisión de los títulos nuevos para atender el compromiso de recompra de preferentes y subordinadas establecido en marzo de 2012.

Volviendo a mi anterior explicación relativa a la ampliación. Puede que mis injerencias y el tono que se desprende de ellas incorporen cierta reprimenda. En parte sí, y lo afirmo porque intento ser muy claro y directo, ya que la mayoría de la gente el martes vivió un ilusorio efecto de riqueza pensando que sus acciones se multiplicaban por 2,2 veces, lo cual es absolutamente erróneo. E insisto, no es interpretación mía, es que la mayoría así lo pensaba. Mi incredulidad era total y absoluta, pero mi indignación también.

¿Por qué me cabreo si nada me deben esos accionistas igual que yo nada a ellos? Porque sigo escuchando a gente que se queja, que despotrica, que habla con un falta de consideración absoluta producto de su desconocimiento y llega un punto en que o se usa este tono o se reitera el error de manera permanente. Porque muchos de ellos volverán a caer. Y seguiré viendo en los foros de consulta en los que participo que la gente sigue atrapada en determinadas acciones. No son las acciones, son los activos que usted ha elegido y en los que nunca, jamás, debería haber depositado sus ahorros.

Si la gente no está dispuesta a entender qué es el dividendo y por qué cuando se da en acciones uno se diluye; si no entiende que está comprando caro un activo sin saber escalar ese concepto de caro o barato, de la misma manera que cree que pagar una ratio de beneficios de 10 cuando antes estaba a 12 sin que el beneficio crezca no es que esté comprando una compañía barata a PER bajo; y, por supuesto, si no entiende los ajustes contables sobre el nominal, las ampliaciones de capital y otras operaciones relativas al mercado… ¿Por qué demonios siguen insistiendo en comprar bolsa?

“Nada en el mundo es más peligroso que la ignorancia sincera y la estupidez concienzuda” (Martin Luther King)