Cybertech 2023 Tel Aviv: ausencia de España, protagonismo de Marruecos

Uno de los principales dilemas a la hora de acudir a un congreso de ciberseguridad como el de Tel Aviv es saber qué outfit ponerse. Yo elegí el que uso a diario: zapatillas de deporte, unos chinos y una camiseta, porque es el que usa la gran mayoría de la gente que se dedica a la ciberseguridad en Israel. Aún recuerdo mi primer día de trabajo con camisa y americana, un perro verde entre mis compañeros. Esta vez no iba a ser la nota discordante.

Los únicos que fueron trajeados, y muchos de ellos también encorbatados, fueron, como no podía ser de otra manera, los políticos. Desde los anfitriones, pasando por los norteamericanos, algunos países del golfo, europeos y hasta Marruecos. Especialmente este último. Tomen nota del creciente protagonismo de Marruecos en estos foros.

Cuerpos de seguridad de medio mundo estuvieron presentes. En nuestro caso, la Guardia Civil apenas mandó a un representante

No me pregunten por el color de las corbatas de los directivos españoles y menos por el de sus dirigentes, ni de sus americanas o camisas, pues prácticamente no fue nadie a excepción de un funcionario de una agencia de aviación y el director del Centro Vasco de Ciberseguridad. Policía y Cuerpos de seguridad de medio mundo estuvieron presentes. En nuestro caso, la Guardia Civil apenas mandó a un representante. Algo es algo.

A lo largo del congreso se repitieron algunas ideas con fuerza. A saber: la cooperación internacional para hacer frente a amenazas sin fronteras, la inteligencia artificial para prevenir y disponer de escenarios predictivos, la importancia del recurso humano en los planes de acción y, sobre todo, la necesidad urgente de concienciación ante los problemas de ciberseguridad a nivel mundial y de formación a todos los niveles para saber a qué nos enfrentamos y qué debemos hacer o qué no debemos hacer.

Benjamin Netanyahu, de nuevo primer ministro con su sempiterna corbata azul, comentó el aumento de ataques cibernéticos disruptivos a escala mundial. También expuso cómo Israel ha podido desarrollar un Iron Dome utilizando inteligencia artificial avanzada para afrontar estos retos, en parte gracias a la creación de un colegio militar (IDF) para ciencias de la computación en Beer Sheva, donde tiene 20.000 personas estudiando y trabajando en ciberseguridad, base de la conocida Unidad 8200.

Fue una muestra de cómo extender los famosos 'Acuerdos de Abraham' a la Ciberseguridad

Robert Silvers, Gaby Portnoy y El Mostafa Rabii, responsables de Ciberseguridad de Israel, EEUU y Marruecos, respectivamente, se mostraron de acuerdo en la creación de una junta de revisión cibernética internacional y reclamaron un cambio transformacional dentro de los propios países para afrontar eficientemente los retos de la ciberseguridad. No hay fronteras físicas ante las nuevas amenazas del ciberespacio. En la misma línea incidió el general Petraeus, destacando el papel del sector privado en este cometido.

En definitiva, fue una muestra de cómo extender los famosos Acuerdos de Abraham a la Ciberseguridad, una muestra clara de la importancia que tiene esta parcela para los países, hasta en zonas donde se viven aún hoy en día conflictos bélicos a la vieja usanza, con infantería y carros de combate, como sucede Oriente Medio.

Resulta muy necesario un cambio transformacional en la forma que tenemos de concebir la ciberseguridad en nuestro país

Como ya mencionamos, llama la atención la falta de enviados de nuestro país en este megacongreso en contraste con la presencia significativa de nuestros vecinos Portugal y Marruecos. Algo debemos estar haciendo mal en España para ir tan retrasados en una materia tan importante como es la ciberseguridad. No tenemos empresas que vayan a exponer y vender su tecnología a ferias y congresos como estos, porque no tenemos un centro público como los que se dan en el resto del mundo.

Resulta muy necesario, por no decir imperioso, un cambio transformacional en la forma que tenemos de concebir la ciberseguridad en nuestro país. Los problemas a nivel mundial están comenzando a ser preocupantes, los ataques se están multiplicando exponencialmente, tanto a instituciones públicas como a empresas privadas, la exposición a la que están sometidas las instalaciones críticas es muy alta y España, quiera o no, forma parte de este mundo.

*Pablo Hita es consultor en Ciberseguridad.