"Por un Mundial sin J.J. Santos"

Hoy toca post catártico. Mis amigos -los buenos y los malos, eso es sintomático- me comentan que en este blog no hay sitio para las críticas amables, sólo para amargos alegatos panfletarios sobre la actualidad cinematográfica y, sobre todo, televisiva, de éste nuestro solar patrio.

Quizá tengan un poco de razón, ya que como el periódico que le da cobijo, esta Carta de ajuste, de ahí el nombre, se creó como un espacio contrapoder. Un reducto de opinión libérrima no amiga de censores, de amiguismos ni dependencias sinérgicas con conglomerados mediáticos cuyos tentáculos pudieran sesgar el contenido.

Pero mis amigos se equivocan en algo fundamental: no soy cruel por vocación. Un servidor ama el cine por encima de todas las cosas -excepto de sí mismo- y acude a ver Habitación en Roma, Robin Hood o Baaria con la esperanza de que esas películas le hagan olvidar por un par de horas que es crítico de cine. Pero no lo consiguen. Y eso le convierte, en cierto sentido, en un sufridor. Cuando dedica cinco párrafos a ajustar cuentas con una de esas cintas, este crítico lo hace desde el dolor que le produce no haber visto en la sala algo sublime.

Con la televisión le pasa un poco lo mismo. La ama como reducto de evasión, siempre que le haga olvidar, durante el tiempo de exposición al medio, que también es crítico de tele. Pero eso casi nunca ocurre.

Concretemos. Causa última de la crisis existencial del crítico en cuestión. Se sienta en el sofá de su casa dispuesto a disfrutar de una noche de fútbol europeo, no tanto por su afición a este deporte, como por la intención de compartir el sueño de una afición que, en su condición de eterna sufridora, por analogía, quizá, le despierta una enorme simpatía. Los colchoneros, claro. Sin embargo algo le impedirá olvidarse durante esos noventa minutos, una vez más, de que es crítico.

Aún hoy, piensa en la cobertura y retrasmisión que Telecinco hizo de aquella final de la Europa League el pasado jueves y le dan ganas de llenar este blog con un amargo panfleto acerca de las habilidades retóricas del narrador omnisciente J. J. Santos. Sobre todo cuando Telecinco le ha 'comprado' a Cuatro los partidos de España en el próximo Mundial. Alguien debería decirle a este caballero, que probablemente es el mejor profesional del mundo, un director de deportes como no ha habido otro, que lo suyo no es la locución de eventos deportivos.

No será este crítico quien lo haga, desde luego, porque no quisiera que sus amigos siguieran pensando que su blog es simplemente un espacio de mofa y escarnio. Así que hoy, dejará que ellos opinen por él:

- Por un Mundial sin JJ Santos.

- YO también estoy en contra de que JJ Santos retransmita el Mundial.

- En el Mundial pondré carrusel y silenciaré la TV para no oír a JJ Santos.

- Tiene más emoción una misa que un partido retransmitido por JJ Santos.

- Recogida de firmas para que JJ santos no retransmita el Mundial.

- 1.000.000 de personas para que JJ Santos no retransmita el Mundial.

- Voy a ver el Mundial por internet si sigue JJ Santos de comentarista en T5.

- Señoras que no soportan a JJ Santos retransmitiendo el Mundial de fútbol.

 

Hay más de veinte grupos en Facebook que dicen lo que un servidor no quiere decir. 

ANEXO: J.J., grandes momentos:

- "Estoy hasta los huevos ya con la puta FIFA de los cojones"

Más en http://twitter.com/NachoGay