El gran dilema

Viven los dirigentes de Intereconomía sumidos últimamente en un proceso de duda. Dudan de sus sentidos, del sueño, de la vigilia, del Genio Maligno, de todo lo que dudó Descartes... pero sobre todo dudan de su futuro. Les va bien. Mejor que nunca. Los datos de audiencia del mes de mayo, que se acaba de cerrar, les otorgan un nuevo récord (1,6%), dos décimas por encima de su anterior marca. Y, aunque el porcentaje de share citado no es como para montar una fiesta en honor al dios Berlusconi, heredero natural de Baco, lo cierto es que gracias a este dato las cosas también les empiezan a funcionar desde el punto de vista económico. No, no se ven por los pasillos de la casa bolsas de basura llenas de dólares marbellíes, pero ya ganan de sobra para comprar el pan.