Parón en la recuperación económica

Cuando la mayor parte de los indicadores todavía no han entrado en positivo, los más adelantados se dan la vuelta de nuevo y pueden anticipar una nueva recesión

En las últimas semanas hemos asistido, como algunos nos temíamos, a una pésima evolución de los indicadores adelantados más significativos. Esto nos muestra que posiblemente la solidez del amago de recuperación económica que hemos vivido en los últimos meses sea nula –como comenté en reiteradas ocasiones desde esta columna– y pinta un panorama desalentador para los próximos meses. Es evidente que los datos aún son pocos, pero la tendencia se ha truncado.

En primer lugar, podemos ver la evolución del índice de confianza del consumidor (ICC) en la estimación que hacen los encuestados de la situación actual. Este indicador fue, posiblemente, el que antes anticipó la debacle de 2007-2009, y en estos momentos vemos cómo ha vuelto a caer.

Este indicador anticipó de una forma casi perfecta tanto la crisis de 2007-2009, en un momento tan temprano como el mes de agosto de 2007, como la recaída de 2011, también en el mes de agosto de ese año. Aunque aún se trata de un descenso de un solo mes, este ha sido bastante significativo.

El problema es aún más preocupante si consideramos el otro indicador que ha anticipado mejor el double dip, que ha sido en PMI de servicios. Este también ha truncado su tendencia al alza en los últimos dos meses, como vemos a continuación. El índice, que puntualmente entró en la zona expansiva en el mes de agosto, en septiembre y octubre ha vuelto a situarse en la zona contractiva.