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El destrozo griego y el castillo de naipes europeo
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Daniel Lacalle

Lleno de Energía

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Daniel Lacalle

El destrozo griego y el castillo de naipes europeo

Semana de máxima tensión en Europa por Grecia, España, Italia o por Chipre –que lo olvidamos, otro que necesita ayuda-. Por todos, seamos claros.  

Semana de máxima tensión en Europa por Grecia, España, Italia o por Chipre –que lo olvidamos, otro que necesita ayuda-. Por todos, seamos claros.  

La solución a la crisis de deuda europea es evidente. No es más gasto, no es más deuda y no es forzar expansión monetaria. Tras consumir billones de dólares en políticas expansivas sin resultado positivo, deberíamos parar y pensar que el daño es mayor que el beneficio. Todos esos mecanismos han probado ser ineficientes. Llevamos cinco años consecutivos de estímulos en Europa, un total de 2,63 billones de dólares. Aportar liquidez debe ser una medida temporal, no estructural. Medio billón cada año es una locura. Mientras tanto, se impone la solución  que es la prudencia presupuestaria, atajar la espiral de gasto político, limpiar los balances de la banca -preferiblemente a cargo de sus accionistas y bonistas-, atraer capital y acabar con las subvenciones improductivas.

El castillo de naipes europeo

La crisis europea continúa y esta página “The European Super Highway of Debt” les muestra visualmente la magnitud del castillo de naipes. Más deuda no nos va a ayudar.

En el mercado de deuda europeo hemos visto esta semana que:

. La deuda pública española ha crecido un 5,39% en el primer trimestre hasta los 774.549 millones de euros, un 72,1% del PIB. Luego dicen que no tenemos un problema de deuda pública. Las reformas deben continuar, pero mucho más rápido.

. La prima de riesgo a 536 puntos básicos. ¿Por qué? Porque la deuda y los gastos financieros del país se dispararían al utilizar el préstamo de 100.000 millones para recapitalizar la banca, haciendo más difícil poder repagar dicha deuda. Hay que demostrar que no va a ser así. ¿Pero no era que “nos atacan”? La prueba del algodón. Los ‘hedge funds’ de bonos europeos han perdido un 0,3% en mayo con las primas de riesgo subiendo un 5%. Si nos estuvieran “atacando”, se verían  ganancias. La realidad es que casi ningún gestor de bonos se puede permitir “atacar” la deuda periférica porque el riesgo de que se lleven a cabo intervenciones masivas de liquidez es demasiado alto. No compensa. Lo que ocurre es que los inversores internacionales están vendiendo bonos soberanos, lo que lleva a las entidades españolas a tener que atiborrarse de deuda pública. Casi un 67% de la deuda del país ya está en manos nacionales.

. Los seguros de impago (CDS) de Francia y Alemania están subiendo casi un 12% en un mes, mostrando que la crisis sigue extendiéndose. Todas las primas de riesgo, incluso la alemana, han subido ante el peligro de otro chute de deuda. Romper el principio de responsabilidad del acreedor lleva a esto. Rescatar países y bancos estructuralmente, pone en peligro al conjunto.

. Nos dicen una y otra vez que el BCE y Alemania no nos apoyan. Sin embargo, las cifras dicen otra cosa. El Bundesbank ha prestado a la periferia europea –España una enorme parte- 699.000 millones de euros desde enero en el esquema Target II, casi un 25% del PIB de Alemania. La banca española, mientras tanto, ha solicitado del BCE otros 7.400 millones de euros, y ya ha tomado 288.000 millones. Liquidez y apoyo no nos faltan.  Nos falta ser más rápidos en tomar las medidas estructurales.

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. Mientras Europa, el BCE, EFSF o ESM, presta a diestro y siniestro, los países que aportan fondos a esas instituciones están casi todos enormemente endeudados y se financian en muchos casos a tipos muy superiores. Il Corriere de la Sera se hacía eco de la ironía que supone que Italia vaya a aportar 19.000 millones de euros al préstamo a España, dándole “dinero” a nuestro país al 3,3% cuando le cuesta financiarse un 6%.

Fíjense en el cuadro inferior. Más del 85% del dinero que se aporta al fondo de estabilidad europeo viene de países muy endeudados, y lo que aportan no es capital. Es deuda.

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El destrozo griego

En todo esto ya llegan las elecciones griegas y con ellas anunciar -ya viene, ya viene- que “a lo mejor” “puede” que “se estudie” la “posibilidad” de una acción concertada de los bancos centrales si Grecia sale del euro.  ¿Más madera? 

El análisis de las elecciones griegas se ha hecho en los mercados desde una perspectiva maniquea.  Nueva Democracia son los buenos y Syriza son los malos. A mí me interesa más el impacto económico, y, como tal, me temo que las elecciones griegas, pase lo que pase, darán un resultado que será malo para la deuda europea.

Digo esto porque, sea por rescates o por impago, Grecia nos pone de manifiesto la fragilidad europea y el riesgo de tapar “deuda con más deuda”. Grecia no es el problema, es parte del mismo, pero puede hacer un destrozo por la exposición cruzada a su deuda del resto de los países.

Para empezar, Grecia necesitará una nueva inyección adicional de unos 15.000 millones en pocas semanas. ¿Recuerdan en abril de 2010 cuando el ex presidente español decía que nuestro país iba a ganar unos 110 millones de euros anuales –sí, anuales- con el préstamo a Grecia? Ahora, ni préstamo ni ganancia.

Poniéndolo de manera simple:

. Si gana Nueva Democracia –los conservadores- o hay un Gobierno pro-troika, Grecia probablemente renegociará los términos del rescate y a la vez requerirá un paquete de medidas de “crecimiento” –traducción: deuda- para proyectos de infraestructura –ya estamos, ladrillo, carreteras y puentes-financiado por el BEI. Digo financiado por decir algo, porque será –al tiempo- a fondo perdido. El “coste” de esta opción se estima entre 50.000 millones de euros y 60.000 millones de euros a 18 meses.

. Si gana Syriza –la izquierda- o hay un Gobierno anti-rescate, nos amenazan con la salida del euro que, en mi opinión, es improbable y que le costaría a Europa entre 300.000 millones y 400.000 millones de euros, según un análisis del propio Eurogrupo, o un billón, según Lukas Papadimos. Y si se quedan, cumpliendo su promesa anti ajustes, el coste tampoco bajaría de 150.000 millones de eruros si Grecia solo fuerza otra quita a su deuda.

. Por supuesto, si se van a una tercera ronda de elecciones –que cuestan la nada despreciable cantidad de 35 millones de euros cada una- prepárense para otro verano caliente.

La realidad es que gane quien gane, en Grecia el esquema hipertrofiado estatal, el gasto político y el clientelismo entre administración pública y partidos es el único que no sufre. Que parece a veces que Syriza fueran una ONG.  Y que la deuda adicional la va a financiar –donar- una eurozona con menos recursos disponibles y cada día más aislada de los mercados internacionales.

Ese enorme esquema de endeudamientos cruzados es la razón por la que cada vez que se anuncia una medida de intervención, el efecto placebo dura pocas horas y estallan las primas de riesgo.  El castillo de naipes de deuda es la raíz del problema de Europa y atajarlo sería el principio de la solución

A cierre de este artículo, se especula de nuevo con la posibilidad de un enorme chute de liquidez (LTRO) del Banco Central Europeo, pero tiene un riesgo considerable. Al usarse la mayoría de esa liquidez para que los bancos compren deuda soberana, se genera un círculo vicioso. Por un lado, esa liquidez no llega a la economía real –los préstamos a familias y empresas siguen cayendo- y, por otro lado, se dobla el riesgo –el del balance de los bancos y el de la deuda pública unidos- porque cuando sube la prima de riesgo también hace que los bancos tengan más dificultades para atraer fondos, pues deteriora sus balances.

El empeño y obstinación que aún pone parte de la Unión Europea en atacar un problema de deuda con más deuda solo aumenta la fragilidad de ese castillo de naipes. Afortunadamente, ya no hay marcha atrás porque el daño crediticio y de credibilidad ya está hecho. Ahora, la Unión Europea al completo debe atacar las deficiencias de su fundación y buscar una unión fiscal real y prudencia presupuestaria creíble. Será entonces, y no antes, cuando volverá el capital internacional y se recuperara  el crecimiento. A por ello.

Semana de máxima tensión en Europa por Grecia, España, Italia o por Chipre –que lo olvidamos, otro que necesita ayuda-. Por todos, seamos claros.