El sucesor, ¿chico o chica?

España es un país con una inveterada afición para hacer cábalas y futuribles. De ahí que tenga tanto éxito los programas de “brujas” que produce y emite mi amigo Nicola Pedrazzoli. Desde el mismo momento que Mariano Rajoy pisó el palacio de la Moncloa ya le estaban buscando sucesor.

Ahora, a propósito de la rutilante victoria de Alberto Núñez Feijóo en Galicia, se le ha puesto ya el dorsal de aspirante “ex aequo” con Ruiz-Gallardón y en competición abierta con otros sonoros nombres del centroderecha.

Miren, tengo para mí y creo conocer algo al personaje, que Rajoy se volverá a presentar (seguro) y es más que probable que vuelva a ganar las elecciones… pese a todo.

Me lo ha dicho Pedro Arriola, sí, pero también tengo pituitaria y capacidad para distinguir las voces de los ecos. Y si fuera como predicen algunos que se ponen solemnes en sus vaticinios sobre el fin del presidente, yo les pregunto: oiga, ¿chico o chica? Porque éstas también cuentan.

Algo que ya está ocurriendo en Ferraz, donde algunos ya dan por hecho la “arrivada” de Chacón, esa chica que todavía no ha demostrado absolutamente nada. Salvo ambición. ¡Vivir para ver!