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Un mes sin jugar: Zidane se la devuelve a Pérez con una patada en el culo de Odegaard
El Real Madrid incumplió su acuerdo para ceder otro año al noruego a la Real, donde hace un año llevaba 16 partidos completos, 4 goles y 5 asistencias, mientras que ahora lleva un mes sin jugar
"Hay contratos y acuerdos que van más allá de la palabra", aseguró el director deportivo de la Real Sociedad, Roberto Olabe, cuando el pasado mes de mayo mostró su optimismo sobre la continuidad una segunda temporada de Martin Odegaard en el equipo donostiarra. Así lo había acordado el Real Madrid cuando ambos clubes, además del propio futbolista, cerraron su cesión. Sin embargo, en agosto todo cambió y, cuando hasta el propio futbolista daba por hecho que seguiría otro año en San Sebastián, fue reclamado desde Valdebebas.
En contra de lo que se dijo y escribió, Zidane no pidió expresamente el regreso del noruego, sino que fue el hecho de que Florentino Pérez decidiera no hacer fichajes lo que llevó al técnico francés a hacerle un sitio en su plantilla. Es decir, que fue el presidente del Real Madrid quien faltó a la palabra con la Real, aunque la mayoría cayéramos en la trampa —o quizás algunos no— de señalar a Zizou, quien nadie duda de que valora el talento de Odegaard, pero, tal y como está dejando patente, para su centro del campo sigue confiando más en veteranos como Modric y Kroos, así como en otros como Valverde e incluso el depreciado Isco, además de Hazard.
"Su salida nos pilló un poco a contrapié, nos hizo pupa", reconoció el mencionado Olabe, quien, en lugar de lamentarse, estuvo rápido y cerró el fichaje de David Silva. El canario acababa contrato con el Manchester City y era el mejor recambio para Martintxo, un jugador fundamental para Imanol. No en vano, la temporada pasada por estas fechas, hasta el parón navideño que llegó el 22 de diciembre de 2019, el noruego solo se perdió por lesión dos de los 18 partidos de Liga disputados por la Real, mientras que los otros 16 los jugó completos, con 4 goles y 5 asistencias, unas cifras que no hacen sino confirmar el gran rendimiento que ofreció.
Sin embargo, de los 16 partidos de Liga que lleva disputados esta temporada el Real Madrid, Odegaard no ha jugado ninguno completo, solo ha sido titular en tres, en otros tantos salió de suplente y en cinco se quedó en el banquillo, los mismos que se ha perdido por lesión. No suma ni goles ni asistencias y, contando los de la Champions League, lleva un total de ocho partidos, sin duda un pobre bagaje para lo mucho que se esperaba de él.
Incluso Isco antes que él
Es verdad que primero fueron las lesiones, una que incluso arrastraba de la temporada pasada y lastró su final de Liga con la Real. Pero después han sido decisiones de Zidane las que impiden que Odegaard sea ese gran 'fichaje' del Real Madrid de cara la temporada 2020-21. Ni siquiera la baja de Modric, el futbolista al que presuntamente iba a dar aire en esta temporada y que ya piensa en renovar por una temporada más, ha permitido a Martintxo tener minutos. Prueba de ello es que en el penúltimo partido, ante el Granada, el croata fue baja, pero Zizou prefirió antes a Isco.
El de este miércoles en Elche fue el tercer partido consecutivo en el que Odegaard se quedó los 90 minutos en el banquillo, tras ser suplente también en Eibar y el mencionado del Granada. Es cierto que venía de estar tres encuentros parado, pero Zizou, poco amigo de las rotaciones, no dudó en optar en Ipurúa por Casemiro, Kroos y Modric, para luego dar entrada a Valverde por el croata. Ante el Granada, Odegaard ni siquiera calentó, y Modric llegó a tiempo para estar en Elche, donde a pesar del 1-1 el francés volvió a elegir a Valverde antes que al noruego.
El caso es que Martin lleva sin jugar desde el pasado 1 de diciembre, cuando fue titular en la derrota ante el Shakhtar Donestk (2-0). Después fue suplente ante el Sevilla FC, en el primer partido de la racha de seis victorias de los blancos, y luego llegó la lesión muscular que le hizo perderse tres partidos, todos en casa, ante el Borussia Mönchengladbach, Atlético y Athletic. A partir de ahí, el ostracismo.
Aquella promesa de Pep Guardiola
Según reveló Jan Age Fjørtoft, miembro de la federación noruega de fútbol, cuando en 2015 el Real Madrid fichó a Odegaard procedente del Strømsgodset IF, Pep Guardiola quiso llevárselo al Bayern. "¡Tienes que llevar a este niño a Múnich, tienes que llevarlo a Múnich! Lo convertiré en el mejor jugador del mundo", cuenta Fjørtoft que le dijo el entonces entrenador del equipo alemán sobre Martin, quien aún tenía 16 años. La verdad es que a Guardiola le gusta moldear a los jóvenes futbolistas, algo que en el caso de Zidane no sucede, por más que iniciara su carrera como entrenador en el Real Madrid Castilla.
La pasada temporada, el internacional noruego jugó 36 partidos con la Real Sociedad, con un total de 2.934 minutos, en los que marcó siete goles y dio nueve asistencias. A sus 22 años, necesita seguir jugando para seguir progresando y sabido era que esto no lo tenía garantizado en el Bernabéu, sobre todo si Modric sigue a pleno rendimiento, marcando incluso goles de cabeza, y finalmente renueva por una temporada más.
Con este panorama, es normal que el noruego no esté contento con su situación, aunque los rumores sobre su posible regreso a la Real Sociedad se antojan infundados, pues por mucho que ahora mismo Zidane cuente poco con él, la temporada va a ser más larga de lo habitual. Martintxo ya ha demostrado de lo que es capaz cuando se le da confianza y, aunque tenerlo en el banquillo sea un lujo, es evidente que su entrenador no se casa con nadie y se la ha devuelto a su presidente con una patada... en el culo de Odegaard.
"Hay contratos y acuerdos que van más allá de la palabra", aseguró el director deportivo de la Real Sociedad, Roberto Olabe, cuando el pasado mes de mayo mostró su optimismo sobre la continuidad una segunda temporada de Martin Odegaard en el equipo donostiarra. Así lo había acordado el Real Madrid cuando ambos clubes, además del propio futbolista, cerraron su cesión. Sin embargo, en agosto todo cambió y, cuando hasta el propio futbolista daba por hecho que seguiría otro año en San Sebastián, fue reclamado desde Valdebebas.