Cholismo puro: atacar a Guardiola retorciendo sus elogios a Simeone

Condenados a no entenderse, pero sí a respetarse. Dada la influencia que ambos entrenadores tienen en sus respectivos equipos, el enfrentamiento de los cuartos de final de la Champions entre el Manchester City y el Atlético de Madrid se ha interpretado como un duelo entre Guardiola y Simeone. La diferencia entre uno y otro la resumió el catalán nada más conocerse su emparejamiento: "Son capaces de evitar que seas lo que eres". Así, mientras Pep siempre quiere llevar la iniciativa y generar juego de la única manera que se puede, a través del balón, el Cholo se centra en neutralizar a su rival e impedir que le gane, algo que, por cierto, no hizo en la ida y está obligado a hacer en la vuelta.

A quienes siguen cayendo en el debate entre ganar y jugar bien, les vendrá bien saber que Guardiola ha ganado el 74,4% de los partidos que ha dirigido. De los 747 que lleva como entrenador, lo ha hecho en 556, con 99 empates y 92 derrotas. Es decir, un 13,2% y un 12,3%, respectivamente. Su media de puntos por partido es de 2,35 en el City, 2,36 en el Barça y 2,41 en el Bayern, aunque es en el equipo catalán donde mejor balance tiene, con 2,58 goles a favor y 0,73 en contra, por los 2,57 y 0,80 en Múnich y 2,50 y 0,85 en Manchester. Como el resto de entrenadores, el único objetivo de Pep es ganar y no puede decirse que con su estilo le vaya mal.

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Sin embargo, ya sea por envidia, cuestiones futbolísticas o políticas, por lo mucho que ha ganado, su pasado culé o su declarado independentismo catalán, salta a la vista la ojeriza que una parte de la opinión pública española le tiene a Guardiola. Solo así puede explicarse cómo se malinterpretaron sus respetuosas e incluso elogiosas declaraciones sobre el ultradefensivo planteamiento de Simeone en el Etihad Stadium, peor incluso que cuando calificó de "atletas" a los jugadores del Real Madrid, en referencia a que "si les dejas correr, son imparables".

Pep habló primero en castellano para 'Movistar' y dijo que fue "un partido muy disputado y muy difícil. Son unos maestros defendiendo todos juntos atrás. Es difícil. Sabemos que en Madrid será difícil", para insistir en que "son muy competitivos y defienden muy bien". A continuación, el entrenador del Manchester City atendió en inglés a 'BT Sport' y no dudó en volver a elogiar al equipo del Cholo. Tras confesar que estaba satisfecho, "mucho", con el resultado, pues "jugamos contra un equipo superior, increíble, al que es difícil enfrentarse", Guardiola habló de "un buen resultado ante un rival difícil". Y añadió: "Teníamos que estar concentrados, ya que no es fácil enfrentarse a un equipo con mucha experiencia en esta competición. Veremos qué pasa allí".

Ya en la conferencia de prensa, ante medios tanto españoles como ingleses, Pep repitió que "fue un partido difícil. Es un rival muy duro. Por momentos jugaron con cinco defensas y cinco centrocampistas y nos costó encontrar espacios". Preguntado por la defensa del Atlético, el técnico del City insistió: "Son muy buenos haciendo esto. Son muy buenos. Llevan muchos años juntos". "Tampoco esperaba ganar por tres o cuatro goles", confesó Guardiola, para añadir que "sabíamos a quién nos enfrentábamos. Son muy buenos en cosas como estas, en tener la paciencia para esperarnos. Defienden muy juntos y muy bien. Cuesta".

Pero, sigamos. Cuestionado por el efecto que tuvo la entrada del inglés Foden, autor del pase que permitió a De Bruyne marcar el único gol del partido, Pep no dudó en repetirse y volver a elogiar el planteamiento de Simeone: "No había espacios. Defienden muy bien, muy compactos y muy atrás. Este tipo de equipos quiere frustrarte y golpearte cuando tienen oportunidad. Son muy buenos, te castigan", reconoció el catalán, a quien durante varias fases del partido se le vio hablando en el banquillo con su mano derecha, Juanma Lillo, sobre cómo intentar derribar al muro rojiblanco, algo que finalmente hizo con la entrada del mencionado Foden.

A vueltas con la prehistoria

Sin embargo, en sus primeras declaraciones, las realizadas a 'Movistar', Pep explicó que "intuíamos que jugarían 5-3-2 y hemos salido tres o cuatro veces por los lados. Luego han ajustado y ha puesto a Griezmann de extremo derecho y a João Félix de extremo izquierdo y se han puesto con dos líneas de cinco". Y añadió: "En la prehistoria, hoy y en 100.000 años, atacar contra cinco y cinco es muy difícil. No hay espacios". ¿Acaso llamó Guardiola prehistórico a Simeone, su planteamiento o, por extensión, al Atlético de Madrid? Pues es evidente que no.

Pero, claro, la manipulación de sus declaraciones no tardó en surtir efecto. "Enamorado de tu historia desde la prehistoria. Orgulloso de ser del Atlético", escribió Koke en redes sociales, para de esta forma dejar claro que no había escuchado lo que había dicho Guardiola, algo que desgraciadamente cada vez ocurre más. El colchonero se dejaría llevar por el primer comentario que escuchó en cualquier chiringuito mediático o, quién sabe, igual es que simplemente se dio por aludido, pues el partido de su equipo no fue precisamente de los que hacen afición, salvo que sea un irreductible Cholista, claro.

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Para defender a Simeone, nada mejor que atacar a Guardiola, por cierto, los dos entrenadores que más cobran, retorciendo sus elogios a un colega con el que sabido es que no comparte la misma visión del fútbol. Basta con decir que lo que más destaca el argentino del City de Pep es "el esfuerzo que tienen por recuperar el balón", para, en esa misma frase, añadir: "Da gusto verles jugar". Difícilmente le oigamos alguna vez a Guardiola decir lo mismo del Atleti del Cholo. Sobre todo, si lo tiene enfrente. Pero de ahí a poner en su boca algo que no ha dicho, por más que pueda (y con razón) pensarlo...