Qué tienen en común Carlos Sainz y Daniel Ricciardo para no querer a Red Bull

El último ha sido Helmut Marko. Sorprenden las reacciones en Red Bull ante la decisión de Daniel Ricciardo. Aún pugnan por entender —o aceptar— las razones del australiano que, indirectamente, también podrían valer para Carlos Sainz. ¿Por qué se ha marchado el australiano y el español no ha aterrizado en Red Bull? ¿Es una buena decisión fichar por McLaren?

Ricciardo aceptó renovar de palabra en los entrenamientos privados de agosto en Hungaroring. En Red Bull tenían incluso ya grabado material promocional con el australiano como protagonista para anunciar la decisión. Pero se levantó al día siguiente de su conformidad verbal y decidió seguir el camino del corazón y el consejo de su entorno, que le insistía en salir de allí. ¿Qué justificaría semejante y tan radical decisión?

"No fue culpa mía"

Rebobinemos a mayo. El Confidencial entrevistaba a Ricciardo durante el Gran Premio de España. Algunas de sus respuestas nos sorprendieron. El australiano nos decía que este sería el Contrato de su carrera, con mayúsculas. Cuestión económica al margen, dos eran sus principales objetivos. Uno, contar con un coche ganador. Y dos, dicho de manera textual: "Quiero sentirme valorado". ¿Valorado? ¿Un piloto de su calibre? Vale, siguiente pregunta. ¿Qué pasó en Bakú?. “Cualquiera que sepa de Fórmula 1 sabe que no tuve la culpa”, respondió.

Ricciardo tuvo que asumir la corresponsabilidad del incidente con Max Verstappen por imposición de Red Bull, que evitaba focalizar todo en un piloto que acumulaba una buena racha de errores, culminada estrepitosamente en Mónaco. Pedir disculpas en la sede de Milton Keynes ante los empleados debió resultar aún más humillante. Hoy resulta inevitable recordar la falta de autoridad en la voz de Chris Horner por la radio en el famoso 'Multi21' al hablar con Vettel o la posición de la Marko. Diferentes episodios, pero el mismo patrón subyacente.

Pues el australiano ha fichado por un monoplaza inferior y menos dinero en Renault. ¿Por qué? Ricciardo debe sentirse más valorado por el equipo francés. Y, sobre todo, porque sale del entorno de Verstappen. Horner insinuaba el temor a la progresión del holandés en el futuro. Pero Ricciardo no le teme tanto como la protección que goza Verstappen, gran apuesta personal del austríaco por las circunstancias que concurrieron en su fichaje cuando era un adolescente. Ricciardo no las tenía todas consigo en Red Bull. ¿Era este entonces el mejor entorno para Carlos Sainz?

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El esquema de Ferrari y Mercedes

Otro enfrentamiento entre el español y Verstappen habría sido extraordinario para la Fórmula 1, y quizás también para el propio Sainz. Pero Red Bull no ha querido unirlos de nuevo. No entraremos aquí en hipotéticos vetos del entorno del holandés, porque no constan. Tras la decisión de Ricciardo y con la oferta de McLaren firme, Sainz solicitó a Red Bull la carta de libertad. En la última cita del Mundial de MotoGP de Austria, su cúpula (Dietrich Mateschitz incluído) se reunió y decidió concedérsela. Hasta donde ha podido saber este medio, no existen posibles contraprestaciones con el tema de James Key (el director técnico de Toro Rosso fichado por McLaren) o de cesión de pilotos para Toro Rosso que estén relacionadas con la libertad de Sainz.

Resulta inevitable pensar que Red Bull ha buscado para Verstappen el mismo esquema de Mercedes y Ferrari: un líder y un cómodo número dos. Porque Sainz tampoco lo ha sido fuera de la pista. Tanto el piloto como su entorno —temas que no se pueden explicar aquí— han sido beligerantes con Marko en momentos clave para defender los intereses del español. Y quien haya seguido desde categorías inferiores la trayectoria de Pierre Gasly puede fácilmente deducir que no es superior a Sainz. Hasta el propio Marko reconocía en una entrevista de 'Servus TV' lo mucho que le falta al francés, a quien concede media temporada de gracia.

El gran desafío

Ahora bien, ¿acierta al fichar por un McLaren en horas bajas y en plena reconversión? En Red Bull, la marcha de Ricciardo podría considerarse un aviso a navegantes. Aunque el cuerpo pide guerra a los aficionados, no cabe ser ingenuos sobre el entorno de Red Bull como confirma la decisión del australiano. Ahora, tanto Ricciardo como Sainz tienen en común su apuesta por un equipo con perspectivas de crecimiento, pero fuera de la tutela de Red Bull y la sombra de Verstappen. En Fórmula 1 se trata de cuajar la mejor de las opciones posibles más que lograr la decisión perfecta. McLaren entra dentro de la primera.

El equipo británico esta inmerso en un ciclo de renovación a diferentes niveles. Cuenta con nuevos y potentes accionistas (Michael Latiffi) que se unen a propietarios que siguen apostando fuerte por McLaren, como se está confirmando. Llevará tiempo, pero la energía de este nuevo ciclo acabará dando frutos. Por su parte, Sainz queda fuera de la tutela de Red Bull por primera vez en su carrera. Es libre ahora tanto profesional como psicológicamente, con una estabilidad de la que carecía hasta el momento, libre ya de otros determinantes políticos que le han condicionado últimamente.

Sin la figura de Fernando Alonso, Sainz tiene la oportunidad y el desafío de pasar a otro nivel en su carrera, de desplegar todo su potencial como piloto y figura pública para así ganarse el corazón de los aficionados, tan monopolizado en España por el potente carisma del asturiano. El listón que le han dejado está muy, pero que muy alto.