La fuerza militar ya no sirve

En menos de 24 horas, tres grandes conocedores de por dónde se vehicula el mundo han venido a coincidir, en conversaciones distintas con este columnista, en algo esencial para entender algo de lo que está sucediendo en el orbe, así como los alineamientos de futuro en un clarísimo nuevo orden.

El general Sanz Roldán, jefe del Centro Nacional de Inteligencia (CNI); José Ramón Garcia Hernández, diplomático y buen seguidor del acontecer mundial; y el ex-Jemad Julio Rodríguez vienen a coincidir en que las fuerzas convencionales militares (última 'ratio' de los Estados para ejercer sus dominios e imponer sus políticas) han perdido alguna o mucha razón de ser al iniciarse el siglo XXI.

Ahora los Estados se apuntan a los ciberataques (caso demostrado de Rusia) para demostrar su potencia a las otras potencias. Tampoco quiere ello decir que matemáticamente sea de esa manera porque todavía hay guerras y conflictos armados convencionales pero en mucha menor medida que antaño. Hoy son las nuevas tecnologías aplicadas a los escenarios bélicos o prebélicos las que privan. Parece que España ha tomado buena nota de todo esto. Cuando queda tiempo después de dedicarnos inveteradamente a lo que siempre fue nuestro fuerte: el cainismo, en ocasiones, por un quítame ahí unos duros o porque quieran un régimen foral tan insolidario como antiguo.

Escrito lo anterior no dudo de que lo que subrayan los expertos pueda ser cierto porque lo es. Pero cuando uno contempla las imágenes apocalípticas de Alepo podría tener la certeza de que los cañones todavía sirven desgraciadamente para hacer el mal.

Casi al mismo tiempo me entero de que Yahoo ha “perdido” datos de 1.000 millones de usuarios. ¿Dónde?