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De Osoro al cura Martín: la libertad de expresión de la Iglesia
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Graciano Palomo

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De Osoro al cura Martín: la libertad de expresión de la Iglesia

El cura Martín –que recriminó a Colau no poner bolardos– podría invocar el famoso derecho a la libertad de expresión en asuntos que no afectan a la moral fundamental de la Iglesia

Foto: El arzobispo de Madrid, el cardenal Carlos Osoro. (EFE)
El arzobispo de Madrid, el cardenal Carlos Osoro. (EFE)

No conozco al cura Santiago Martín y sí al cardenal Carlos Osoro. No me ha extrañado, como algunos sorprendidos, la bronca que le ha propinado desde su condición de purpurado católico a su subordinado eclesiástico.

Pudiera ser que utilizar un púlpito católico para recriminar a la alcaldesa de Barcelona su negativa a los bolardos resulte algo extemporáneo y escasamente en la línea franciscana del papa argentino, pero supongo que el cura Martín –con una fuerte deriva mediática– podría, a su vez, invocar el famoso derecho a la libertad de expresión en asuntos que no son 'ex catedra' ni afectan a la moral fundamental que sostiene la Iglesia de Roma.

placeholder Santiago Martín, párroco de Cuatro Caminos.
Santiago Martín, párroco de Cuatro Caminos.

Sinceramente, no me ha extrañado ninguno de los dos comportamientos. Conozco en primera persona la importancia que algunos jerarcas eclesiásticos concede a ese derecho fundamental. Digo jerarcas porque aunque no salen a la calle 'ensotanados' (Barriocanal, Pérez del Puerto, Velasco) se han hecho ricos o han conseguido poder sumergidos entre las enaguas empresariales de la Iglesia universal. La libertad de expresión palidece cuando ella no coincide con sus intereses 'ad hominem' o sus grupitos de presión internos. Prefieren mantener como presidente de la Fundación COPE o como consejero de 13TV a un señalado por el juez García-Castellón que soportar opiniones que no resultan de su agrado.

Conocen la opinión de este modesto escribidor. La Iglesia de Cristo tiene que ser, obligatoriamente, de origen divino porque con esos mimbres hace tiempo que estaría yaciendo en el fondo de la Historia.

La elección del papa Francisco fue saludada 'urbi et orbi' con generalizado entusiasmo global y mundial un 13 de mayo de 2013. Cuatro años después mi pregunta es la siguiente: ¿se nota esa elección en la Iglesia española?

¡Ustedes me dirán!

No conozco al cura Santiago Martín y sí al cardenal Carlos Osoro. No me ha extrañado, como algunos sorprendidos, la bronca que le ha propinado desde su condición de purpurado católico a su subordinado eclesiástico.

Atentado Cambrils Carlos Osoro Ada Colau