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El alegato de Joaquín Sabina
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Graciano Palomo

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El alegato de Joaquín Sabina

Solo echo de menos en Sabina una canción al respecto. Cuanto más “cachonda”, faltona, irónica y hasta cruel… mejor

Foto: El cantautor español Joaquín Sabina en Quito. (EFE)
El cantautor español Joaquín Sabina en Quito. (EFE)

El cantautor variopinto, tipo 'made in izquierda' donde los haya, ha reconocido, sin embargo, que no es un "político", ni siquiera un "opinador político". Se fue hasta Quito y desde allí mandó una punzada terrorífica al corazón de los chicos secesionistas a los que sin citar les reconoce como la muchachada del vuelo gallináceo.

Me divierten las canciones de Joaquín Sabina y he leído en ocasiones algunas boutades del extremeño condecorado por Madrid que me han divertido aún más. Debo escribir y escribo acto seguido que la enjundia con la que analizó desde Ecuador el problema catalán me sorprendió no por el contenido patriótico o por el continente incontenible (a estas alturas al columnista personalmente se la trae al pairo esto y lo de acullá). Digo que, desde mi modesto punto de vista, el análisis fue certero sobrevolando todos los pormenores abracadabrantes de la temporada. Es el análisis de un señor viajado, que sabe de qué va esta vaina, horrorizado ante lo minúsculo del empeño rupturista catalán.

Foto:  El cantante Joaquín Sabina, en Quito (Ecuador). (EFE)

Pero también me ha sorprendido que no le han dolido prendas para defender a su país democrático acerca de algunas cosas que lee en la prensa extranjera.

“No es Cataluña contra España, subraya, no. Es Cataluña contra Cataluña...”.

“Conozco familias que ya no se hablan entre ellos, hay amigos míos que ya no pueden opinar públicamente porque quieren seguir siendo españoles…” . Quizá el más conocido y el más amigo de todos ellos, Joan Manuel Serrat.

Los mayores males que ha sufrido Europa han sido por culpa de los nacionalismos… Estoy en contra de hacer una patria pequeñita teniendo una tan grande…”.

Digo que, desde mi modesto punto de vista, el análisis fue certero sobrevolando todos los pormenores abracadabrantes de la temporada

Este es el gran asunto del “conflicto” real o inventado por una élite que persigue sus denarios a toda costa.

Solo echo de menos en Sabina una canción al respecto. Cuanto más “cachonda”, faltona, irónica y hasta cruel… mejor.

¡Venga!

El cantautor variopinto, tipo 'made in izquierda' donde los haya, ha reconocido, sin embargo, que no es un "político", ni siquiera un "opinador político". Se fue hasta Quito y desde allí mandó una punzada terrorífica al corazón de los chicos secesionistas a los que sin citar les reconoce como la muchachada del vuelo gallináceo.

Joaquín Sabina Catalán Serrat Ecuador