Sánchez contra el PSOE

Tomás Gómez que fue dirigente del PSOE en Madrid ha publicado un artículo “políticamente no correcto”, titulado 'Que Dios me guarde'.

Sin citarle, se refiere al diputado Sánchez (Pedro) cuando era tan raso que Zapatero le obligó a defender y votar a favor de la modificación del artículo 135 de la Constitución según la cual se establecía que los primeros en cobrar del Estado serían los que hubieran prestado dinero al mismo. Recuerda Gómez: “Algunos mostramos el desacuerdo, no porque significaba que quien tenía la última palabra no era política, sino la economía y que los poderes financieros obligaban a cambiar algo tan intocable como la Constitución…”

“Hubo quienes defendieron la medida con pasión, nos acusaron a los que teníamos reparos e incluso pidieron el relevo en nuestras responsabilidades (entrega del acta de diputados)…” Se vuelve a referír al gran exégeta del zapaterismo de aquel momento, Pedro Sánchez.

El daño para el PSOE ya está hecho, ningún acto de contrición devolverá la confianza a los votantes que la perdieron en el 2011

Continúa Gómez: “Años después alguno de ellos (Sánchez) renegó de su apoyo a la medida y, a día de hoy, plantea abiertamente la modificación. El que fuera secretario general del PSOE madrileño, desalojado en su momento abruptamente por Sánchez, dice que la principal actividad para desalojar a Mariano Rajoy del poder fue de Pablo Iglesias, nunca de Pedro Sánchez. Ahora, dice Gómez, los morados exigen a Sánchez el cambio en el artículo 135 de la Constitución…”Pasar de ser un 'hooligan' del artículo 135 a firme detractor requiere algunas explicaciones porque los intereses socialistas van a verse claramente mermados…”.

El daño para el PSOE ya está hecho, ningún acto de contrición devolverá la confianza a los votantes que la perdieron en el 2011.

Tomás Gómez olvida, en mi opinión, algo esencial. Pedro es Sánchez y Sánchez siempre será de Pedro.