Factótum Sánchez-Llibre

Los desaforados progubernamentales de la reciente y claudicante "cumbre" España-Cataluña se han empeñado en subrayar las condiciones y cualidades del "gran timonel" Sánchez que es capaz de engañar a todo el mundo.

Por ejemplo, destacan que todo el mundo acudió a la cena organizada por la patronal catalana Foment del Traball desde Inés Arrimadas al candidato del PP a la alcaldía de Barcelona. Sí, claro, acudieron pero no persiguiendo la estela inmarcesible del pobre Sánchez. Acudieron al llamado de Josep Sánchez-Llibre que ejercía de anfitrión.

Conozco desde hace muchos años al catalán Josep, Pepito para los amigos. Su apuesta, junto con Josep Antoni Durán i Lleida, fue y es por una Cataluña catalanista, fuertemente catalanista pero también fuertemente imbricada en España. En su caso, levantada desde una perspectiva económica, industrial y empresarial y desde un 'seny' a prueba de bomba.

Aquella apuesta política no fue posible como me recordaba el mismo no hace mucho tiempo. Fue una gran pena para todos. Sus colegas empresarios, tras su paso por CEOE como consejero especial del ex Joan Rosell, le han elegido como su representante en Foment. Esa organización empresarial es un poder fáctico reconocible en aquella atribulada tierra. Estoy seguro que contribuirá a fortalecer el sentido común e inyectará dosis de realismo a los desvaríos psiquiátricos.

Ya fracasó en el empeño cuando se dedicaba a la política. Ahora toca la segunda parte del partido.