Palo Alto
Por
Marlaska, el 'crack'
Un juez en activo, asombrado ante lo que califica "deriva Marlaska", me remite un memorándum acerca de su excolega recordando los años en los que eran compañeros en los juzgados de Bilbao
Un juez en activo, asombrado ante lo que califica "deriva Marlaska", me remite un memorándum acerca de su excolega recordando aquellos años mozos cuando ambos compartían toga en los juzgados de Bilbao.
"Entonces, dice el asombrado, Fernando Grande-Marlaska era inequívocamente de 'derechas' y yo estaba en el 'centro'… Él hizo su gran carrera en la Audiencia Nacional y en el Consejo General del Poder Judicial gracias al apoyo de la derecha (PP) y yo me quedé como estaba… ¡Un crack!".
Así es, en efecto. ¿Cuándo se "jodió" —Vargas Llosa dixit— el Marlaska de derechas para caer entregado en brazos de Sánchez? El mismo juez asombrado tiene la respuesta: cuando apareció el poder.
Me hubiera gustado conocer el alma del revitalizado ministro cuando oía hablar en nombre de Bildu a la tal Aizpurua, condenada por apología de terrorismo, heredera de aquellos a los que Marlaska enviaba a la cárcel en sus tiempos de togado. Ahora, gracias a la abstención de la muchachada abertzale, el otrora ejecutor de la ley continuará viviendo en Castellana, 5 y cenando —es de suponer que por cuenta propia— en Malasaña.
Siempre me han interesado más los hechos que las palabras, mucho más en personas que se dedican a la política. Y los hechos son tan evidentes que nadie osará desmentirlos. Se ha llevado por delante la cúpula de la Guardia Civil en Cataluña. ¿Por qué será? ¿Acaso los mandos de la Benemérita se han vuelto locos de repente? Verde y con asas.
Me cae bien el ministro del Interior. Disfruto observándole chapoteando en el poder como un niño con triciclo. Lástima, que tan poco dure. Y cuando finalice su etapa en la mamandurria y el oropel tendrá que hacer balance si vivió y se condujo como dice pensar.
Un juez en activo, asombrado ante lo que califica "deriva Marlaska", me remite un memorándum acerca de su excolega recordando aquellos años mozos cuando ambos compartían toga en los juzgados de Bilbao.