¡Por favor! Díganle a Sánchez la verdad (con urgencia)

Los generales romanos cuando volvían victoriosos a la cuna del Imperio siempre tenían al lado una figura denominada 'triunfus' que ante las aclamaciones de la plebe y desde su rincón de la cuadriga mascullaba: "Acuérdate de que eres mortal...".

Pedro Sánchez no debería tener esa tentación porque en los casi dos años que lleva en el poder su gestión tiene un epíteto: desastre. Sus triquiñuelas de catón, su 'barriobajerismo' político, sus mentiras encadenadas, sin embargo, pierden vigor ante la suprema incapacidad demostrada para dirigir un país a la deriva y su chapoteo grosero para entender lo que está ocurriendo.

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EC Agencias

Lejos de un 'triunfus', ante la total ausencia de éxitos, Sánchez lo que verdaderamente necesita es alguien con redaños que le diga la verdad de lo que sucede en el país del que es jefe de Gobierno. Que oiga el clamor silencioso de la multitud que cada mañana hace cola en los supermercados; el gemido sordo de los familiares de miles de víctimas derrotadas y que esperan en las morgues; los suspiros inciertos del millón y medio de nuevos desempleados; la rabia de los profesionales de la información a los que se les trata como meros sicarios; los miles de medianos y pequeños empresarios a los que se les ha arrojado al estercolero; los 47 millones de españoles que no se merecen tanta mentira y tanto engaño; los 47 millones de españoles que se merecen un gobierno digno y respetable... ¡En fin! Un pueblo español que se merece unos representantes ejecutivos que merezcan el calificativo de tal.

¿No hay nadie en el PSOE, en el Gobierno, que no le deba nada a Sánchez? ¿Acaso algún familiar cercano se atreviera a decirle la verdad de lo que ocurre allende fronteras de la Moncloa? ¿Algún generoso en su entorno que le susurre lo que está pasando por el alma del pueblo español?

Hemos terminado por comprar la mercancía de Dante a la entrada del Quinto Infierno:

"Abandonad toda esperanza...".