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Historia de plagios y dimisiones... en Europa
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Graciano Palomo

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Historia de plagios y dimisiones... en Europa

En Europa plagio es sinónimo de corrupción. De corrupción intelectual que inhabilita para el ejercicio de cualquier cargo público e incluso privado

Foto: Bandera de la UE. (EFE)
Bandera de la UE. (EFE)

Sánchez amenazó al vetusto periódico nacional que destapó el escándalo de su tesis –grandes porciones copiadas por los amanuenses de un texto presentado en la inexportable universidad Camilo José Cela que debería estar bajo la lupa de los garantes de la CAM– en un intento por acallar la obscenidad y, sobre todo, para que sus colegas europeos no tuvieran conocimiento de lo perpetrado.

En Europa plagio es sinónimo de corrupción. De corrupción intelectual que inhabilita para el ejercicio de cualquier cargo público e incluso privado. Y Sánchez, irónicamente, se encaramó al poder utilizando un caso de corrupción del PP, caso que existió y no podía consentirse en modo alguno. ¡Así es la vida! Luego vinieron los ERES….

Una breve historia al respecto. Hace unos días se conocía el caso de... Pero no es el único. A Thèodor zu Guttenberg, a la sazón ministro de Defensa y el más firme candidato a la sustitución de la canciller Merkel, le faltaron 48 horas para presentar la dimisión y zambullirse en el oprobio y la oscuridad. El Bundestag abrió una investigación con la universidad y le fue retirado el título de doctor.

El pasado lunes se conocía que la ministra de Trabajo de Austria, Christina Aschbarcher, dimitía 20 horas después de ser acusada

Mucho más próxima en amistad a la canciller teutona era Annette Schvan, ministra de Educación. Había en su tesis 60 citas sin autor. A la calle… La también germana Silvana Koch-Mehrin, vicepresidenta del Parlamento Europeo, dejó su escaño y sus oropeles de forma inmediata. En la República Checa, la ministra de Justicia, Tat'ána Malá, fue descubierta refritando varias páginas sin cita… A la calle. En el mismo país, el ministro de Trabajo, Petr Kreal, cogió su mismo camino de forma fulminante.

El presidente de Hungría, Pal Schmitt, dejó de ser jefe de Estado por similares prácticas académicas. El pasado lunes se conocía que la ministra de Trabajo de Austria, Christina Aschbarcher, dimitía 20 horas después de que un profesor universitario la acusara en su blog de haberse apropiado en su trabajo de fin de carrera de ideas que no eran exactamente propias.

Esto es Europa. España debe estar demasiado al sur…

Sánchez amenazó al vetusto periódico nacional que destapó el escándalo de su tesis –grandes porciones copiadas por los amanuenses de un texto presentado en la inexportable universidad Camilo José Cela que debería estar bajo la lupa de los garantes de la CAM– en un intento por acallar la obscenidad y, sobre todo, para que sus colegas europeos no tuvieran conocimiento de lo perpetrado.

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