Tribuna Internacional
Por
La Unión Europea: espectadora o protagonista de su futuro
La UE se encuentra al margen de toda decisión de estrategia internacional, condenada a la irrelevancia ante el nuevo escenario por la lucha de la hegemonía mundial entre China y EEUU
En menos de un año, el escenario mundial ha cambiado sustancialmente. Tres fechas son claves para comprender lo que está sucediendo.
El 30 de agosto de 2021, EEUU se retira de Afganistán, lo que se calificó como un fracaso después de 20 años de ocupación y el principio del fin del imperio. Aunque ya estaba decidida la retirada, EEUU se fue apresuradamente sin informar a sus aliados. Se argumentó, por la Administración Biden, el agotamiento de los estadounidenses de una guerra sin fin, la disminución de la amenaza terrorista y la imposibilidad de formar un Gobierno democrático. Sin embargo, no parece que esas fueran las verdaderas razones que motivaron la retirada. Todo indicaba que era una retirada táctica para ahorrar fuerzas y recursos que se presumía que iban a ser necesarios ante nuevas amenazas, como después se ha demostrado. Retirada estratégica para una nueva política exterior. EEUU se enrocaba.
El siguiente movimiento no tardó en llegar. El 15 de septiembre de 2021, se anuncia una nueva alianza en el Indo-Pacífico. Aukus, el acrónimo con el que se designa el pacto anunciado (de AUS, UK y US), se compromete a compartir tecnología avanzada de defensa para hacer frente a las amenazas —sin mencionar a China— que se ciernen en la región del Indo-Pacífico. El nuevo pacto puso fin a un acuerdo de Australia con Francia para fabricar 12 submarinos de diseño francés firmado en 2016 por 50.000 millones de dólares australianos. El Gobierno francés mostró su indignación por la ruptura del acuerdo. Nuevamente, la Unión Europa estaba desinformada y quedó descolocada.
Meses después, el 24 de febrero de 2022, tras advertir EEUU de la preparación de la invasión de Ucrania por Rusia, las tropas rusas cruzan las fronteras y amenazan varias ciudades, entre ellas la capital, Kiev. Con un lenguaje propio de la posverdad, Putin califica la invasión de operación especial para evitar un genocidio. Una operación que se ha ido fraguando desde hace años. Se ha despertado el espíritu belicista del pueblo ruso utilizando la desinformación y el adoctrinamiento nacionalista. De forma astuta, durante años se ha tejido una tela de araña sobre Europa, que, confiada, ha ido alimentando los sueños de Putin, incluso levantando simpatías entre líderes políticos europeos. La guerra del siglo XXI ya no solo utiliza las armas, se emplea la diplomacia energética con el gas y el petróleo ruso para maniatar a los países europeos y financiar la guerra, incluso el trigo ucraniano, jugando con el hambre en el mundo. Se utiliza la amenaza de una catástrofe nuclear que se cierne sobre Zaporiyia. Rusia mueve ficha y EEUU trata de contrarrestar su avance suministrando armas. Europa es el territorio amenazado y en disputa.
Todos los movimientos descritos estaban planificados por las potencias mundiales, la Unión Europa los desconocía y se encuentra al margen de toda decisión de estrategia internacional, condenada a la irrelevancia ante el nuevo escenario por la lucha de la hegemonía mundial entre China y EEUU. Faltan servicios de información, análisis y planificación conjunta a largo plazo, una política exterior, energética y de defensa común. Sobran declaraciones grandilocuentes e intereses nacionales mezquinos. Alemania depende del gas ruso, Francia es reticente a un gasoducto que una España con Alemania para disminuir la dependencia de Rusia, Hungría paga a Rusia en rublos el suministro de gas y petróleo en contra del criterio de los países europeos. Todo un ejemplo de la inoperancia.
Alemania ha empezado a rearmarse dando un giro a su política de gasto en defensa desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Suecia y Finlandia atisban el peligro y se cobijan bajo el paraguas de la OTAN. Taiwán está amenazada por China, la tensión se desplaza a Asia. Rusia y China quieren ocupar el vacío que dejan la Unión Europea y EEUU en América latina y África ofreciendo ayuda militar. ¿Cuál será el siguiente movimiento por la hegemonía mundial? ¿Qué papel desempeñará la Unión Europa? ¿Será espectadora o protagonista de su futuro?
*Francisco Pleite Guadamillas. Doctor en Derecho.
En menos de un año, el escenario mundial ha cambiado sustancialmente. Tres fechas son claves para comprender lo que está sucediendo.
- La Europa equilibrista ante los nuevos retos geopolíticos Arancha González Laya
- Queridos proeuropeos: la UE necesita que os peleéis más Nacho Alarcón. Bruselas
- ¿De excepción ibérica a normalidad europea? La UE se abre al 'desacople' energético María Zornoza. Bruselas