La innovación como pilar de un mundo más avanzado y humanizado

Vivimos tiempos marcados por avances e innovaciones hasta hace poco impensables y que, tal como auguran numerosos expertos, van a cambiar radicalmente el mundo que conocemos. La realidad es que los grandes cambios en nuestra sociedad llegan a través de las revoluciones tecnológicas. Sin embargo, y como suele suceder con la llegada de cada nueva revolución, muchos expresan sus dudas y no dejan de plantearse el papel de la tecnología en nuestro futuro como sociedad y hasta qué punto puede contribuir a deshumanizar nuestro entorno.

En este contexto, el gran reto al que hoy nos enfrentamos en la industria tecnológica es situar a las personas en el epicentro de la innovación. Avances como la inteligencia artificial, el 'cloud', el internet de todas las cosas (IoT), las nuevas redes 5G y, por supuesto, el nacimiento de nuevas realidades como el metaverso son y continuarán siendo palancas para la evolución de la economía y la sociedad.

Pero tenemos que ir todavía más allá. Debemos convertir estas innovaciones en elementos verdaderamente transformadores. De este modo, las nuevas revoluciones tecnológicas han de plantearse, desde su origen, como pilares fundamentales para abordar importantes desafíos, entre los que se incluyen la reducción de la brecha digital, el desarrollo rural, la educación o el cuidado medioambiental, entre otros muchos.

Efectivamente, tal como recoge el informe 'Mundo inteligente 2030', elaborado por Huawei, se espera que para la próxima década las nuevas tecnologías ayuden al logro de cambios disruptivos, y a resolver problemas y retos críticos del desarrollo humano, en ámbitos como la salud, la alimentación, la vivienda, el entorno de trabajo y el transporte. El objetivo es que la tecnología ayude a mejorar la calidad de vida de las personas y contribuya a preservar nuestro entorno.

Un nuevo paradigma para nuevos desafíos

Hoy se impone establecer un nuevo paradigma en el que la tecnología y la innovación actúen como motor de crecimiento y evolución desde una perspectiva holística. Este es un logro que únicamente se podrá alcanzar con una estrecha colaboración y el trabajo conjunto de empresas, Gobiernos e instituciones.

Conscientes de este enorme desafío, estamos reforzando nuestros acuerdos y alianzas en esta línea, además de realizar un gran esfuerzo inversor e impulsar nuestra alta capacidad de innovación. El camino que hemos elegido está guiado por el convencimiento de que, para avanzar en la digitalización, la transformación inteligente y lograr un mundo con bajas emisiones de carbono, es esencial contar como base con el talento, la investigación científica y un espíritu innovador.

"Garantizar un entorno digital seguro y confiable requiere de la colaboración público-privada, así como de una responsabilidad compartida"

Esta es precisamente la filosofía con la que nació por ejemplo nuestra iniciativa TECH4ALL, y desde la que en Huawei hemos puesto en marcha distintas acciones para ayudar a la inclusión digital de las personas y organizaciones en áreas como la educación, el medio ambiente y la salud. El objetivo es que nadie se quede atrás. Esto ha supuesto la creación de ecosistemas digitales y programas para ayudar a los desarrolladores a crear aplicaciones dirigidas a diferentes comunidades e industrias.

Los retos son numerosos y continuos, lo que supone que no podemos bajar la guardia. Debemos seguir trabajando para consolidar las bases que nos permitan aportar valor, a través de la innovación y la tecnología, para seguir evolucionando y creciendo, y lograr un mundo mejor para todos.

En este trabajo para seguir innovando, avanzando, sin duda, es clave también la ciberseguridad:una de las principales prioridades no solo para las compañías tecnológicas, sino para empresas de cualquier sector y la sociedad en general. Garantizar un entorno digital seguro y confiable requiere de la colaboración público-privada, así como de una responsabilidad compartida entre todos los actores.

*Eric Li es CEO de Huawei España.