Es noticia
El Barça debería hacerle (otra vez) pasillo al Real Madrid, pero no para ser humillado
  1. Deportes
  2. A mi bola
Kike Marín

A mi bola

Por

El Barça debería hacerle (otra vez) pasillo al Real Madrid, pero no para ser humillado

El Clásico del sábado es noticia por lo que pueda pasar antes del partido y no durante y después, pues una victoria azulgrana dejaría a los blancos provisionalmente a 14 puntos

Foto: Xavi saluda a Raúl en el pasillo que el Barça le hizo al Madrid en 2008
Xavi saluda a Raúl en el pasillo que el Barça le hizo al Madrid en 2008

Se lo echó en cara un entrenador al presentador del programa de televisión (donde se habla más sobre el fútbol que de fútbol) en el que, después de la exhibición de Iniesta y Messi ante el Deportivo, lo primero que destacó fue el manotazo de Luis Suárez al suizo Schär. Nos guste o no, esto es algo que impera cada vez más en el fútbol español. "La guarnición se ha comido al solomillo", suele decir Juanma Lillo. Es por esto que tampoco deba sorprendernos que en los días previos al Clásico de este sábado se hable más del pasillo que el FC Barcelona no hará al Real Madrid tras su reciente Mundial de Clubes que de un partido que puede dejar provisionalmente a los blancos a 14 puntos de los catalanes.

Pero bien, puestos a hablar de lo que tanto parece interesar, si acaso en la Liga, aunque tampoco es algo que esté instaurado sino que suele improvisarse, hacer pasillo a un rival que acaba de proclamarse campeón es algo voluntario, un gesto que tiene que surgir con total naturalidad, pues si se quiere imponer no solo pierde todo el sentido, sino que puede suceder como en esta ocasión, que el Barça rehuya hacerlo. Se trata de homenajear al ganador, no de humillar a quien le hace el homenaje y esto es precisamente lo que algunos parecen querer. "Siempre hemos dejado claro que solo lo hacemos cuando nosotros participamos en esa competición y no es el caso", explicó el pasado domingo Guillermo Amor, responsable de las relaciones institucionales del equipo catalán.

Foto: Julen Lopetegui, actual seleccionador español, y Pep Guardiola, cuando entrenaban a Oporto y Bayern, respectivamente. (Reuters) Opinión

Lo cierto es que tanto el Real Madrid como el Barcelona han demostrado a lo largo de la historia ser dos clubes que han sabido estar a la altura de su grandeza, con el famoso señorío y los no menos conocidos 'valors', respectivamente. Sin embargo, es cierto que en los últimos años que las cosas han cambiado, especialmente desde la llegada de Mourinho al banquillo del Bernabéu, con una excesiva tensión y demasiados y desagradables incidentes cada vez que ambos equipos se veían las caras. En circunstancias normales no estaría de más que este sábado, con un horario más pensado para los chinos que para los abonados del Real Madrid, el Clásico ofreciera al mundo un gesto de deportividad como un pasillo del Barça a su anfitrión, más que nada porque tampoco sería la primera vez.

'Baño al fondo del pasillo'

Así recuerdo que titulé la crónica de aquel Clásico en el que el Barça no tuvo ningún problema en homenajear al Madrid en el Bernabéu. Fue el 7 de mayo de 2008, tras ganar los blancos la Liga una semana antes en Pamplona. El 4-1 con el que acabó el partido, con goles de Raúl, Robben, Higuaín y Van Nistelrooy, más el del honor de Henry para los visitantes, reflejó la superioridad madridista ante un rival que al día siguiente anunció que Pep Guardiola relevaría a Frank Rijkaard. De aquel equipo azulgrana solo queda Messi, mientras que del Real Madrid sobreviven dos, Sergio Ramos y Marcelo. La grada acabó pidiendo la 'manita' y si alguien guarda un recuerdo especialmente malo de ese día ese es Xavi Hernández, pues el centrocampista catalán fue expulsado por doble amarilla en el minuto 92.

placeholder Xavi, en el momento de votar en la embajada de España en Doha
Xavi, en el momento de votar en la embajada de España en Doha

Votar en Doha vestido de amarillo

Por cierto, según desveló 'Esport3', el programa deportivo de 'TV3', Xavi, que ahora juega en el Al Sadd catarí, votó a las elecciones catalanas en la embajada española en Doha y lo hizo entre proclamas sobre "la vergüenza que representa el Estado español" por "no dejar votar y tener presos políticos". Xavi estará en Barcelona este jueves, pero no podrá votar en las elecciones autonómicas de Cataluña por ser residente en Doha, razón por la cual decidió personarse en la embajada de España en la capital de Qatar para ejercer su voto. Lo hizo vestido con un polo amarillo, como bien es sabido, el color que han adoptado los secesionistas para pedir la excarcelación de 'los Jordis' y los 'exconsellers'.

Con motivo del referéndum ilegal del 1-O, el 133 veces internacional con la Selección española ya dijo que “lo que está sucediendo en Cataluña es una vergüenza; es inadmisible que en un país democrático la gente no pueda votar". Si como asegura Xavi, España fuera un Estado opresor, algo que, por cierto, sí es el emirato árabe en el que ahora reside, él no podría haber votado en las elecciones que se celebran este jueves en Cataluña y es probable que hacer pasillo al Real Madrid fuera, como antiguamente el servicio militar, obligatorio.

Foto: Xavi, en el momento de entregar la Eurocopa que estaba en posesión de España. (Reuters) Opinión

Pero, no, aunque yo el primero creo que pierdo y hago perder el tiempo hablando de pasillos en lugar de hablar de fútbol, es verdad que tampoco podemos dejar de denunciar que algunos agiten las ramas del árbol para que otros recojan las nueces y que siempre haya algún alcornoque que confunda las cosas, se vista de rojo o de amarillo según le convenga y hable de democracia desde un país donde no se vota ni para elegir al delegado de clase.

Se lo echó en cara un entrenador al presentador del programa de televisión (donde se habla más sobre el fútbol que de fútbol) en el que, después de la exhibición de Iniesta y Messi ante el Deportivo, lo primero que destacó fue el manotazo de Luis Suárez al suizo Schär. Nos guste o no, esto es algo que impera cada vez más en el fútbol español. "La guarnición se ha comido al solomillo", suele decir Juanma Lillo. Es por esto que tampoco deba sorprendernos que en los días previos al Clásico de este sábado se hable más del pasillo que el FC Barcelona no hará al Real Madrid tras su reciente Mundial de Clubes que de un partido que puede dejar provisionalmente a los blancos a 14 puntos de los catalanes.

Santiago Bernabéu Xavi Hernández