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El triunfo de los idiotas
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Javier Molina

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El triunfo de los idiotas

Por el momento, apostar contra los idiotas se ha convertido en un juego muy peligroso...

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Que las tendencias emocionales y cognitivas humanas deben ser estudiadas e incorporadas en todo proceso de toma de decisiones de inversión, a estas alturas de los mercados, es una realidad tan evidente que ya no admite argumento alguno en contra. La combinación del mayor ciclo de expansión económica y fiscal de todos los tiempos, junto a la llegada masiva de nuevos participantes a las bolsas, ha provocado un nuevo evento histórico: el aumento indiscriminado de los precios de los “Stonks” y el destierro de los expertos financieros.

En la cultura de internet se denominó “Stonks” al meme utilizado cuando uno se refería al trading de acciones y que, tras los sucesos de enero de este año se ha vuelto a poner de moda. Los “Stonks” ganaron nueva atención mediática debido a su utilización en la guerra iniciada a través de una comunidad de Reddit (WSB) cuando hace unas semanas, se llamó a los usuarios a la guerra contra Wall Street y que, en esencia, consistía en invertir de forma agresiva en acciones de dudoso futuro como GameStop o AMC para provocar que los cortos abiertos en esas “Stonks”, saltasen por los aires y generasen las mayores pérdidas posibles a esos bajistas.

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Si en 2017 eran unos 2 millones los usuarios de brókers como Robinhood, a día de hoy se superan los 13 millones en esa sola plataforma que, multiplicado por las numerosas aplicaciones disponibles a golpe de “clic” y excitados en las redes mencionadas, crean una masa de reclutas especulativos capaces de disparar el precio de ciertos activos un 2000% en pocos días, poner en aprietos a algunos inversores institucionales y terminar cargándose la teoría de la eficiencia de los mercados (EMH). En ese contexto, mucho del “Smart money” ha visto mermada su rentabilidad a favor de aquellos forajidos de los mercados.

En un momento de múltiplos excesivos y pese a la presión de los tipos a largo plazo marcados por el bono a 10 años norteamericano, la burbuja de todos los activos sigue (y puede seguir aún mucho más) su curso, dejando de manifiesto que los mercados son ineficientes e irracionales y que, definitivamente, la teoría de los mercados eficientes no existe y construir una cartera optimizada, un absurdo. Con las cotizaciones de las acciones, el inmobiliario y hasta el bitcoin (BTC) del que soy un gran seguidor, totalmente fuera de control, lo irracional se convierte en racional mientras se sigue atrayendo a nuevos jugadores en busca su pedazo de fortuna.

Y es en este contexto, en el que todo sube sin ni siquiera saber a qué se dedica la compañía o, en el caso de los criptoactivos, qué representa cada token cuyo precio se persigue y cuyo objetivo no responde más que a intentar atrapar al que podría subir un 50% en una sesión, aquellos que siguen su estrategia y ciertos fundamentos de inversión se convierten en los nuevos idiotas y, desde ese punto de vista de rentabilidad, los idiotas son ahora los nuevos listillos del momento.

Así las cosas y en un momento donde ni los fundamentales, ni las valoraciones, ni la información disponible, ni el tener una estrategia de gestión de riesgo importan ya, la atención se centra en intentar descubrir cuál será el próximo movimiento que llevarán a cabo esos lelos ganadores, sin importar ni la racionalidad ni el motivo de tales decisiones. Como dicen algunos, por el momento, apostar contra los idiotas se ha convertido en un juego muy peligroso.

Que las tendencias emocionales y cognitivas humanas deben ser estudiadas e incorporadas en todo proceso de toma de decisiones de inversión, a estas alturas de los mercados, es una realidad tan evidente que ya no admite argumento alguno en contra. La combinación del mayor ciclo de expansión económica y fiscal de todos los tiempos, junto a la llegada masiva de nuevos participantes a las bolsas, ha provocado un nuevo evento histórico: el aumento indiscriminado de los precios de los “Stonks” y el destierro de los expertos financieros.

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