Es noticia
'Better Call Saul': deconstruir un laboratorio para acercarse un poco más a 'Breaking Bad'
  1. Televisión
  2. Series
Aloña Fernández Larrechi

Desde Melmac

Por
Aloña Fernández Larrechi

'Better Call Saul': deconstruir un laboratorio para acercarse un poco más a 'Breaking Bad'

El spin-off ha cerrado una de sus entregas más notables, que ha contado con una trama centrada en uno de los escenarios más importantes de la producción original

Foto: Imagen del quinto episodio de la cuarta temporada de 'Better Call Saul'. (Movistar)
Imagen del quinto episodio de la cuarta temporada de 'Better Call Saul'. (Movistar)

Escribir una serie no tiene que ser fácil, pero la tarea del guionista puede complicarse aún más si debe tomar como referencia un universo previo para crear una serie derivada o spin-off. Y si además la producción de referencia es una ficción alabada por la crítica, la industria y el público, la tarea se antonja inalcanzable. Algo así pensábamos muchos cuando AMC anunció, cinco meses antes del final de 'Breaking Bad', que la producción de Vince Gilligan tendría un spin-off centrado en uno de sus personajes secundarios más importantes, Saul Goodman.

Cuatro temporadas después de la llegada de 'Better Call Saul' a la pequeña pantalla, son pocos los que deben seguir pensándolo. Porque los premios no son tan generosos con ella como con la producción original, los seguidores son más silenciosos y la crítica se distrae fácilmente con cualquier otra cosa. Pero la creación de Peter Gould y Vince Gilligan es tan notable como su predecesora. Y como ésta, su calidad no depende únicamente de la trama principal y se rodea de historias secundarias con identidad y relevancia propias. O en este caso, con nexo propio.

Foto: 1 Opinión
TE PUEDE INTERESAR
'The Walking Dead': el fenómeno televisivo zombi que cavó su propia tumba
Aloña Fernández Larrechi Gráficos: Daniele Grasso

"Peter Gould, quien creó el personaje de Saul Goodman, estaba escribiendo un episodio de 'Breaking Bad' cuando nos dijimos: "¿No sería divertido hacer un spin-off de 'Better Call Saul'? Cuando dijimos eso, Sony y AMC, nuestro estudio y cadena en EEUU, fueron muy generosos y dijeron: "Sí, hacedlo". Y cuando firmamos el contrato y la tinta ya estaba seca fue cuando nos dijimos: ¿Y de qué va a ir esta serie?". Con estas palabras Vince Gilligan reconocía en una entrevista a Movistar + que la existencia de la serie protagonizada por Bob Odenkirk era poco menos que casual. Algo que engrandece aún más el producto final, que a base de capítulos ha sabido tejer un universo propio en el que todo parece cuidadosamente estudiado.

A lo largo de cuatro temporadas, Gould y Gilligan han ofrecido a los seguidores de 'Better Call Saul' pequeños aperitivos del futuro del abogado que contrató Walter White en 'Breaking Bad'. Pero el banquete principal gira en torno a su pasado, al viaje que vive un hombre llamado Jimmy McGill para convertirse en el picapleitos que todos conocimos en la serie "madre". Una particular fiesta en el que le acompañan su hermano, su diversa vida social, su carrera como abogado y su inevitable vertiente criminal. La historia de un hombre que trata de encontrarse a sí mismo mientras engaña a los demás, la excusa para contar otro gran relato vital sobre la mediana edad en el siglo XXI.

Y el menos relevante de los nexos para la historia que nos contaron entre 2008 y 2013, la culpable de su existencia. Porque la responsabilidad de alimentar el ansia "breakingbadiana" de los seguidores más acérrimos recae sobre dos personajes "menos principales" que, en la última entrega de 'Better Call Saul', han protagonizado una de las tramas más sorprendentes, nostálgicas e interesantes de las últimas temporadas.

placeholder Gus Fring y Mike Ehrmantraut. (Movistar)
Gus Fring y Mike Ehrmantraut. (Movistar)

La verdadera conexión

McGill, tan embaucador como cobarde, era el contacto criminal menos violento en la agenda de Walter White. La sangre, los policías emparedados entre coches, y las explosiones corrían a cargo del apellido Salamanca, ya fuese voluntariamente o por orden de sus superiores. Algo que también sucede en 'Better Call Saul', que desde su arranque alterna la trama principal con la historia de otro viejo conocido, Mike Ehrmantraut. Un hombre entrado en años que lo mismo lleva al parque a su nieta que planea una sofisticada trampa contra su último enemigo.

En la tercera entrega de 'Better Call Saul' el universo de 'Breaking Bad' coló otro personaje, el temido y admirado Gus Fring. Y el nexo con la serie "madre" se afianzó gracias a las relaciones de Ehrmantraut y el gerente de los Pollos Hermanos con Héctor Salamanca, el patriarca de la peligrosa familia. Tras cometer la osadía de robarle, Ehrmantraut necesita lavar su botín y para ello propone a Fring una asociación empresarial que, a petición del hostelero, deberán mantener en secreto.

Para entonces, el octavo capítulo, Gus ya había hecho saber a la audiencia que estaba buscando una lavandería industrial con la que expandir su cartera de negocios. Ese lugar de apariencia gris, habitualmente transitado por empleados y clientes, al que durante tantas jornadas fueron a trabajar Walter White y Jessie Pinkman.

A PARTIR DE AQUÍ SE COMENTAN ASPECTOS DE LA CUARTA TEMPORADA DE 'BETTER CALL SAUL', SI NO LA HAS VISTO TE RECOMENDAMOS QUE NO SIGAS.

placeholder El laboratorio de 'Breaking Bad'.
El laboratorio de 'Breaking Bad'.

Deconstruir para construir

En la cuarta temporada, Gould y Gilligan decidieron seguir explotando la dupla Ehrmantraut-Fring a partir del nuevo proyecto empresarial. Pero no por su vertiente más limpia, la lavandería Brillante, sino por aquella que permanecía bajo tierra, el sofisticado laboratorio construido para fabricar metanfetamina. Un lugar que vimos por primera vez en la tercera entrega de 'Breaking Bad', y que a partir de entonces se convirtió en uno de los escenarios habituales de la serie. O el único, como pudimos ver en el episodio de la mosca.

Para llegar a esas escenas, alguien tuvo que colocar el reluciente instrumental químico, elegir la precaria escalera, pintar el suelo en tonos rojizos o alisar las paredes de cemento. Y antes, con nocturnidad y sigilo, alguien tuvo que hacer el agujero en el suelo. La primera piedra, el primer cubo de tierra, del lugar que trastocó la ambición de Fring y se convirtió en la particular cárcel de White y Pinkman.

La responsabilidad recayó tras una particular entrevista de trabajo, y un descarte previo, en un ingeniero alemán y un puñado de compatriotas. Jóvenes, estos últimos, dispuestos a vivir en dos casas modulares instaladas en una nave industrial gigante, durante un plazo de tiempo que dependerá del desarrollo de la obra. Un particular "Gran Hermano", sin mujeres pero con barra libre de cerveza, en el que el premio final es un cuantioso cheque, y un acuerdo de privacidad, sin fama ni portadas.

placeholder Werner y Mike revisando la obra.
Werner y Mike revisando la obra.

Érase una vez una lavandería

Mike aconseja a Fring a la hora de habilitar las instalaciones en las que vivirán los obreros y que se parezcan más a un hogar que un secuestro. La primera de muchas tareas que le convertirán en el hombre de referencia para unos jóvenes que tendrán dificultades para lidiar con el aislamiento social que implica su contrato. Solo Mike empatizará con su situación, y por ello trabajará por ofrecerles un respiro momentáneo. Aunque, finalmente, se encontrará con la traición del hombre más inesperado y deberá dejar a un lado sus sentimientos, que los tiene, para cumplir con su trabajo.

La deconstrucción del laboratorio es una propuesta creativa brillante por muchas razones. Gould y Gilligan no se decantaron por posibles tramas en las que predominase la acción o se desarrollase un conficto. Deciden regresar a un escenario familiar, en el que lo que primaba era la química, para apostar algo tan entretenido como la ingeniería, y los agujeros gigantes en el suelo. Y con mucho cemento, un puñado de hombres y sus miedos, la segunda mitad de la cuarta temporada de 'Better Call Saul' ha construido la introducción de la lavandería Brillante. Un lugar imprescindible en el universo de 'Breaking Bad', que encontró su desenlace el día que White y Pinkman decidieron borrar sus huellas, al final de la cuarta temporada de la serie.

Si la vertiente más técnica del negocio de las drogas no era suficiente para los más melancólicos, en el tercer capítulo de la cuarta entrega los creadores introdujeron en la historia otro viejo conocido de la producción original, Gale Boetticher. El simpático especialista en química orgánica que quedó fijado para siempre en las mentes de los espectadores como aquel hombrecillo ataviado con un pañuelo morado, que se había grabado cantando "Major Tom" en un karaoke asiático. Encarnado por David Costabile, Gale es el hombre que Fring elige para dar con la fórmula de la metanfetamina más pura y termina siendo el culpable de la llegada de Walter al laboratorio.

placeholder Gus visitando a Gale en su laboratorio. (Movistar)
Gus visitando a Gale en su laboratorio. (Movistar)

La fusión de universos se acerca

El joven y entusiasta científico aparece de nuevo en el último episodio, visitando el oscuro agujero que acogerá su laboratorio. Esta aparición, que Mike observa atentamente desde las alturas, invita a pensar que el personaje de Costabile regresará en la quinta entrega de 'Better Call Saul'. Y su relevancia en la tercera temporada de 'Breaking Bad', cuando conocimos su peculiar forma de hacer café y su devoción por Walt Withman, podrían convertirle en uno de los personajes más importantes de la próxima entrega. Para acompañar la puesta a punto de uno de los laboratorios mas conocidos de la televisión, con los inicios de un químico friki que murió, como acostumbran los clásicos del género espía, porque sabía demasiado.

La próxima temporada está garantizada, aunque no tiene fecha de estreno. Pero algunos ya alertan de que el final puede estar más cerca de lo que parece. En una entrevista a The Independent, Gould reconoció que le gustaría que 'Better Call Saul' tuviera "el mismo número de episodios que 'Breaking Bad". Es decir, 62, veintidós más de los que forman ahora las cuatro temporadas.

Tiempo suficiente para acabar la obra, aunque sea sin jefe, comprar el material del laboratorio discretamente y convertir el lugar en la envidia de cualquier capo de la droga. Y para contar también el primer día de Goodman en su peculiar, y añorado, despacho. O conocer sus primeros, y más ilustres, clientes. O resolver una de las grandes incógnitas: ¿por qué Kim no formaba parte de la vida del abogado cuando éste apareció por primera vez en 'Breaking Bad'?

Escribir una serie no tiene que ser fácil, pero la tarea del guionista puede complicarse aún más si debe tomar como referencia un universo previo para crear una serie derivada o spin-off. Y si además la producción de referencia es una ficción alabada por la crítica, la industria y el público, la tarea se antonja inalcanzable. Algo así pensábamos muchos cuando AMC anunció, cinco meses antes del final de 'Breaking Bad', que la producción de Vince Gilligan tendría un spin-off centrado en uno de sus personajes secundarios más importantes, Saul Goodman.

Movistar+