Es noticia
Rajoy presenta libro: señores con espíritu de barra libre hablan de sus cosas
  1. España
  2. Ideas ligeras
Ángeles Caballero

Ideas ligeras

Por

Rajoy presenta libro: señores con espíritu de barra libre hablan de sus cosas

Hay gente que llega a una edad con espíritu de barra libre, un ‘melabufa’ infinito, un 'cualquier tiempo pasado fue mejor porque también estaba yo' como estado de WhatsApp

Foto: El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, acompañado por el la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. (EFE/David Fernández)
El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, acompañado por el la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. (EFE/David Fernández)

Quizás haya cierta confusión en lo que significa ser adulto. Como si llegar a una cierta edad implicara jactarse de otros, ejercer cierto matonismo verbal y gozar a cada insulto como gorrino en maizal, mirar por encima del hombro y rechazar de plano lo nuevo. También lo diferente.

Hay gente que llega a una edad con espíritu de barra libre, un ‘melabufa’ infinito, un 'cualquier tiempo pasado fue mejor porque también estaba yo' como estado de WhatsApp. Y es interesante escuchar, templar, sonreír un ratito y pedir al Altísimo que nos acoja a todos y perdone a los que nos ofenden.

placeholder Mariano Rajoy, acompañado por el periodista Carlos Herrera. (EFE/David Fernández)
Mariano Rajoy, acompañado por el periodista Carlos Herrera. (EFE/David Fernández)

A Carlos Herrera, por ejemplo, cuando dice que Greta Thunberg es una “adolescente histérica e iracunda”, llama a lo que trajo el movimiento 15-M “piojera intelectual”, cita a Gramsci porque queda muy progre y se mofa de las palabras resiliencia, empatía o sostenibilidad.

Fueron algunas de las perlas que tuvo a bien utilizar el periodista almeriense y bético para presentar el segundo libro de Mariano Rajoy —‘Política para adultos’ (Plaza & Janés)—, que sigue siendo un señor al que su paso por Moncloa no le ha echado décadas a las espaldas. Parecía que la vida le pesaba poco cuando ejercía, así que imaginen ahora.

placeholder Mariano Rajoy (d), acompañado por el presidente del PP, Pablo Casado. (EFE/David Fernández)
Mariano Rajoy (d), acompañado por el presidente del PP, Pablo Casado. (EFE/David Fernández)

El expresidente del Gobierno también parece estar instalado en ese a mí plin en bucle, su dejadez en la pronunciación hasta decir basta. “Pablo Casao”, “educao”, “lo decía Popper y lo he copiao”. También dice “zascandil”, “chisgarabís” y “millonetis” cuando habla de Varoufakis, términos que escuchaba de pequeña en casa cuando me juntaba con mi abuela a ver a Pepe Isbert llamando desesperado a Chencho en ‘La gran familia’.

Rajoy hace risas con el lenguaje inclusivo porque en determinados contextos de cortinón y mármol queda fetén. También deja claro que, en caso de ser preciso, es capaz de levantarse del sofá y batirse en duelo si alguien osa criticar al emérito. Figura maltratada y atropellada siendo un 'molt honorable' vecino de Dubái.

Foto: El presidente del PP, Pablo Casado, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, asisten a la presentación del libro del expresidente del Gobierno Mariano Rajoy. (EFE)

Pero también hubo tiempo para cosas de adultos. Porque Rajoy detecta algunas “derivas malas para la convivencia”. Por eso cree oportuno, además de hacer una cierta reivindicación personal (“no saben no estar”, dice mi amiga Isabel Vázquez), recordarnos lo importante que es defender la democracia liberal, señalar el populismo como uno de los mayores retos a los que se enfrenta, y lo necesario que resulta mejorar la democracia.

Lo bueno y lo malo de Rajoy es que sigue siendo Rajoy. Un hombre que presenta libros y la prensa asiste a sus palabras a través del plasma. Un 'déjà vu'. Un hombre que reúne a un montón de exministros que aseguran estar mucho más contentos que cuando gobernaban. Un hombre capaz de reunir a Casado y Ayuso y que el posado de ambos se convierta en el mayor objeto de deseo desde el de Chenoa y Bisbal en el 20 aniversario de OT. Un Casado y una Ayuso que tenían que haber ensayado los gestos antes de salir de casa. Y una mujer, Elvira Fernández Balboa, esposa del autor, a la que esta tarde le tocó ejercer de mediadora familiar entre el presidente del PP y la de la Comunidad de Madrid. Y aún se preguntan qué diantres es la resiliencia.

Quizás haya cierta confusión en lo que significa ser adulto. Como si llegar a una cierta edad implicara jactarse de otros, ejercer cierto matonismo verbal y gozar a cada insulto como gorrino en maizal, mirar por encima del hombro y rechazar de plano lo nuevo. También lo diferente.

Mariano Rajoy
El redactor recomienda