El papelón de Elizegi con Llorente para no reconocer la realidad del Athletic

"Fernando, ¿tú por cuánto vendrías?". Así titulaba un prestigioso medio como 'El Correo' la "frenética jornada" del cierre del mercado futbolístico en Bilbao. Aunque resulte insólito, y por más que su presidente lo desmintiera sin ponerse colorado delante de quien así lo desveló desde su propio club, fueron los futbolistas del Athletic quienes no solo impulsaron, sino también abanderaron, el regreso de Llorente a un equipo del que sabido es cómo salió, al grito de mercenario y con pintadas de 'Llorente, bastardo' o 'muérete, español'.

Fue Rafa Alkorta, el presunto director deportivo del Athletic, quien lo desveló durante la presentación del navarro y exosasunista Alex Berenguer. Un acto al que, por cierto, asistió su presidente, Aitor Elizegi, aunque solo como oyente. Según Rafa, varios jugadores del equipo rojiblanco se reunieron con él en su despacho de Lezama y le pidieron expresamente el fichaje del delantero riojano, actualmente en el Nápoles tras jugar en la Juventus, el equipo al que se marchó en 2013 tras no querer renovar su contrato, Sevilla FC, Swansea y Tottenham. Alkorta, con el visto bueno del entrenador, Gaizka Garitano, se lo trasladó a la Junta, que rechazó la operación al no haber consenso

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"¿Por qué el club inició movimientos con Llorente si la junta no quiere ficharle?", le preguntaron a Elizegi, el cocinero antes que presidente que se dignó a comparecer ante la prensa tras casi cinco meses sin hacerlo. "Eso no es verdad", respondió el máximo dirigente rojiblanco. "No es verdad que los jugadores tomaran la iniciativa", aseguró Aitor para sorpresa de una sala en la que, además de varios miembros de su directiva y empleados del club, se encontraba el propio Rafa Alkorta, sentado en primera fila y que a buen seguro pensaría aquello de tierra, trágame.

El interlocutor estuvo rápido y comentó "eso dijo", en referencia a Alkorta, quien, visiblemente contrariado, se volvió y se dirigió al citado periodista: "Perdóname... Yo no dije eso. Dije que me llamaron (los futbolistas), no que iniciaran nada. A ver si queda claro ya, ¡joder! No es tan difícil", añadió el ex madridista. Pero, sí, es difícil de entender, pues las grabaciones no ofrecen dudas sobre lo que dijo el presunto director deportivo del Athletic y lo que ahora niega que dijo. ¿Mintió también Yuri, quien en las redes sociales dejó un mensaje en el que aseguraba que la plantilla había hecho lo posible para que la contratación de Llorente se llevara a cabo?

Efectivamente, insólito o no, se esté a favor o en contra del regreso de Fernando, la iniciativa la tomaron los futbolistas. Fueron ellos quienes decidieron llamar a su excompañero y tantearle sobre si estaría dispuesto a volver a Bilbao, conscientes de cómo salió de allí, pero también de lo que a sus 35 años aún podría aportarles viendo las deficiencias de su equipo, especialmente de cara a la portería rival. En vista de su situación en el Nápoles, donde le resta un año de contrato pero no ha sido inscrito para jugar la Serie A, es normal que Llorente fuera receptivo. Pero de ahí a decir que fue él quien se ofreció, se antoja tan falso como ruin.

Las contradicciones que delatan al presidente

Si no es porque fue Rafa Alkorta quien confirmó estos movimientos, desde la iniciativa de los futbolistas al hecho de que él mismo hablara con el ariete internacional, alguien podrían pensar que Elizegi estaba diciendo la verdad, pero no es así. Si varios miembros de su Junta se negaron en rotundo al regreso de Llorente es precisamente porque el asunto estuvo sobre la mesa. "El club habla con el jugador, pero no inicia ninguna operación con este futbolista", llegó a reconocer Aitor.

"Las puertas de Ibaigane no se cierran de un portazo a nadie y cogemos el teléfono a cualquier persona que llama al Athletic", añadió el cocinero antes que presidente, para dar a entender que fue Llorente quien llamó y a continuación asegurar que no se negoció con él, aunque muy enterado tampoco debió de estar, pues él mismo dijo que "no he preguntado por el proceso, no me interesa". A pesar de la insistencia de los periodistas, Elizegi no aclaró nada y terminó haciendo un papelón.

Después de tres derrotas en los primeros cuatro partidos de LaLiga, ante rivales como Granada, Alavés, Cádiz y Eibar, donde ganó, y con la visita del Barça aplazada, y unas pérdidas de 20 millones de euros, el ambiente en Bilbao no está para aguantar espectáculos como el ofrecido en el caso Llorente. El presunto director deportivo no se siente desacreditado y asume que su trabajo es presentar opciones y que sea la junta directiva la que decida. Sí, la misma que desautorizó un fichaje a coste cero —sin contar la ficha— pedido por los futbolistas y gestionado por un Alkorta al que Elizegi dejó en evidencia, aunque no por ello tenga la intención de dimitir.

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Y es que el caso Llorente solo ha dejado en claro una cosa: el Athletic es un desgobierno y, si ocho años después de su marcha, la solución deportiva pasa por el regreso del delantero que de un día para otro dejó de ser navarro, es que algo no se está haciendo bien tanto en Ibaigane como en Lezama. Las comparaciones son odiosas, pero algunas son tan inevitables como reveladoras. Según puede verse en su presupuesto de la temporada 2019-20, la plantilla deportiva del club bilbaíno supone un gasto de casi 85 millones de euros, mientras que la de la Real Sociedad fue de 56. Aquí lo dejo. Para intentar solucionar un problema lo primero que hay que hacer es reconocerlo, no engañarse y, sobre todo, no intentar engañar a los athleticzales.